La consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, ha criticado que el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, haya rechazado su propuesta de establecer un presupuesto extraordinario para los Bancos de Alimentos en la región.
La consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, ha criticado que el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, haya rechazado su propuesta de establecer un presupuesto extraordinario para los Bancos de Alimentos en la región.
García Espada ha realizado esta propuesta durante su intervención en el Consejo Territorial de Servicios Sociales y pretendía ayudar a las personas que no puedan acceder a las nuevas tarjetas monedero.
En dicha reunión, la consejera ha señalado que la implantación de las tarjetas monedero será una realidad en «las próximas semanas» en Extremadura pero que el cambio de modelo lleva aparejada una «situación crítica».
«Nos preocupan los 20.000 extremeños que quedan fuera de esta prestación», ha lamentado, por lo que ha preguntado al ministro «si se ha planteado dotar a los bancos de alimentos con un presupuesto extraordinario que aborde hacer frente a los usuarios no beneficiarios de estas tarjetas monedero».
INSISTE EN QUE ES UNA «RESPONSABILIDAD COMPARTIDA»
Sara García Espada ha insistido en que se trata de una «responsabilidad compartida» y que en la reunión el ministro ha tenido que escuchar «a todas las comunidades autónomas» manifestándose en este sentido.
«Quedan muchas familias fuera y estamos hablando de una necesidad básica como es la alimentación, por lo que es necesario preguntarse qué hacemos con estos españoles que quedan fuera de esta prestación que hasta ahora sí recibían», se ha cuestionado la consejera.
Además, García Espada ha anunciado que Extremadura se une «a la petición de votación de un acuerdo de mínimos de derivación en aras de una igualdad entre españoles» y de un aumento en el plazo de implementación en 2025 del nuevo sistema en relación con las comunidades autónomas.
Además, durante la reunión las comunidades han reclamado un protocolo común del Ministerio de Derechos Sociales para toda España que aclare «todas las dudas existentes» y aporte «seguridad jurídica» al procedimiento de entrega de las tarjetas a las familias, ha destacado la Junta en nota de prensa.
AFECTA A MÁS DEL 80 POR CIENTO DE USUARIOS
La consejera de Salud y Servicios Sociales extremeña ha estimado que más del 80 por ciento de los usuarios de los Bancos de Alimentos en Extremadura no estarán cubiertos con el programa de tarjetas monedero destinado a la compra de alimentos para familias vulnerables.
Del total de 27.747 extremeños que anteriormente recibían alimentos directamente, aproximadamente 22.104 no recibirán esta asistencia a través de las tarjetas monedero. Es decir, solo unas 6.647 personas serán beneficiarias de este nuevo sistema, ha calculado la Junta.
En este sentido, el Ejecutivo regional ha recordado que, durante este año 2024, la provisión de estas tarjetas es responsabilidad del Ministerio de Derechos Sociales.
Además, ha incidido en que, con el sistema anterior, a través del Fondo de Ayuda Europea a las Personas Desfavorecidas (FEAD), cuyo reparto se gestionaba mediante los Bancos de Alimentos de Badajoz y Cáceres, así como Cruz Roja, se brindaba asistencia a unas 28.747 personas, incluyendo aproximadamente a 18.111 que vivían en hogares con menores a cargo.
Considerando la asignación económica que el Gobierno central destinará a las tarjetas monedero en Extremadura, la Consejería de Salud y Servicios Sociales estima que habrá fondos disponibles para unas 1.898 tarjetas, beneficiando a alrededor de 6.647 personas. «Esto significa que el 80 por ciento de las personas que actualmente reciben ayuda quedarán excluidas», ha aseverado la Junta.
Esto implica que de las aproximadamente 18.111 personas que hasta ahora recibían alimentos del FEAD y tienen menores a su cargo, alrededor de 11.466 personas quedarán sin cobertura, a pesar de cumplir los requisitos para ser beneficiarias de las tarjetas monedero.
«Es importante destacar que estos cálculos se basan en la cuantía de ayuda establecida por el Gobierno central en el Programa Básico, que varía desde los 130 euros mensuales para una familia con dos miembros hasta los 220 euros mensuales para una unidad de convivencia de cinco miembros o más», ha incidido.
Además, los establecimientos donde se pueden utilizar estas tarjetas son limitados y no se encuentran en la mayoría de los municipios, lo que afecta principalmente a las zonas rurales, donde puede resultar más difícil utilizar las tarjetas.