Más del 15% de las plantillas de los centros de atención a la discapacidad recurren a sustancias químicas para afrontar el estrés
El sindicato CCOO de Extremadura ha demandado a la patronal del sector de atención a la discapacidad que evalúe los riesgos psicosociales a los que se ven sometidos los trabajadores, que, en su mayoría son mujeres, al ser ésta una labor muy feminizada.
CCOO ha organizado este viernes en Mérida unas jornadas dirigidas a los delegados sindicales en estas empresas para que informen a los trabajadores de los efectos y consecuencias de los riesgos psicosociales, la intervención ante los mismos y los derechos laborales.
El secretario de Salud Laboral de CCOO de Extremadura, Alberto Franco, y la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Extremadura, Lourdes Núñez, momentos antes del inicio de estas jornadas, han insistido en que en los centros de trabajo en los que se atienden a la discapacidad, en ocasiones, se trabaja en situación de estrés y sometidos a presión.
«El estrés puede además repercutir también en lo físico de las personas y echamos en falta muchas veces la evaluación por parte de las empresas, que no evalúan el origen», ha subrayado Franco.
En este sentido, el secretario de Salud Laboral de CCOO Extremadura ha recalcado que no se puede seguir consintiendo que, en muchos centros de trabajo, sobre todo mujeres, «sigan tomando pastillas diariamente sin que se evalúe por parte de la empresa los daños y perjuicios» que en estos centros de trabajo se dan.
Por ello, ha insistido en la petición a la patronal del sector de que forme e informe a los trabajadores y ponga medios «cuanto antes mejor» para que estos riesgos psicosociales que se dan «desaparezcan».
Por su parte, la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Extremadura, Lourdes Núñez, ha señalado que al sindicato le preocupa el sector de las personas que trabajan en atención a la discapacidad por la carga no solo de trabajo físico sino también psicosocial y emocional.
Así, se pretende con esta acción que los trabajadores aprendan a detectar los motivos por los que están somatizando la carga organizativa y la carga de trabajo y cómo eso afecta a su salud mental y a su condición del sueño, irritabilidad o de «cansancio perpetuo».
«Todo esto no es más que una somatización de un trabajo que no se organiza adecuadamente y, en el que en muchos casos, no voy a decir en todos, pero en muchos casos, se confunde la voluntariedad con el voluntarismo y se piden acciones más allá de nuestro trabajo porque son personas profundamente implicadas con sus usuarios y sus usuarias», ha recalcado.
De este modo, Núñez ha insistido en que «realmente» el «problema» se encuentra en la organización del trabajo y los descansos y también en cómo los trabajadores deben atajar esta situación con la ayuda del sindicato pero también con estrategias personales. «Muchas veces nos falta empatía, pero también nos falta asertividad a la hora de negociar en las mesas, en los centros de trabajo», ha apuntado.
MÁS DEL 15% DE LAS PLANTILLAS RECURREN A SUSTANCIAS QUÍMICAS
A preguntas de los medios, Lourdes Núñez ha apuntado que más del 15 por ciento de las plantillas del sector de la atención a la discapacidad en Extremadura, que suman unas 4.000 personas, recurren a sustancias químicas para afrontar el estrés, el cansancio, el agotamiento o el insomnio que les produce su trabajo.
Núñez también ha apuntado que los centros de atención a la discapacidad son centros de «espectro amplio» y, en ocasiones, albergan, junto a personas con discapacidad, a otras con trastornos de salud mental no diagnosticada, lo que supone una «sobrecarga psicológica y emocional importante».
ATE-CUIDADORES
Por otro lado, a preguntas de los medios, la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Extremadura, Lourdes Núñez, ha recordado que sus sindicato lleva reclamando desde hace «mucho tiempo» la continuidad de la contratación de los ATE-Cuidadores que prestan servicios en los centros educativos públicos de la región atendiendo a los alumnos con necesidades especiales.
Así, ante las críticas del sindicato USO sobre el despido de unos 370 ATE-Cuidadores de centros educativos a final de junio, Núñez ha apuntado que estos trabajadores son personal laboral al servicio de la Junta y, por tanto, se eligen por convenio.
«¿Cuáles son las dificultades que tenemos con estos convenios? Primero que tenemos que terminar un proceso de estabilización, y segundo que son contratos de tipo fijo discontinuo, es decir, inician el curso y terminan cuando termina el curso», ha aseverado.
De este modo, ha indicado que CCOO viene reclamando la continuidad de la contratación pero ha incidido en que «hay que estar finos en qué se reivindica», ya que el alumnado que necesita un ATE-cuidador debe tener un acompañamiento a lo largo de toda su vida estudiantil, «más allá de primaria», y ha propuesto «reevaluar las formas de geolocalización para la petición de centro».
EP