La localidad pacense de Villalba de los Barros celebra este sábado, 21 de octubre, y el domingo, su tradicional mercadillo medieval con motivo de la fiesta de ‘La Atalaya del Azor’, que se celebra cada octubre, con la figura de su castillo como protagonista de la festividad.
La programación divulgada por el ayuntamiento incluye una visita guiada al castillo, espacios de juego para menores, un tren turístico y la representación teatral de ‘El heredero deseado’ a manos del grupo de teatro L’Arrabal.
La celebración fue bautizada con este nombre porque, inicialmente, el castillo fue una atalaya árabe o fortaleza «construída durante la Reconquista (722-1492) por los árabes para, de alguna manera, defenderse de los reyes cristianos», según ha explicado a Europa Press el cronista oficial de la localidad, Luis Becerra.
La primera remodelación del castillo de Villalba se hizo a comienzos del siglo XIV cuando Enrique Enríquez el Mozo construyó la torre del homenaje, mientras que la segunda tuvo lugar a comienzos del siglo XV cuando los Suárez de Feria hicieron del edificio su lugar de residencia.
Parte de aquella reforma puede apreciarse actualmente en la torre del homenaje, alguna bóveda de cañón, ventanas de tipo mudéjar y restos de pinturas en el interior de la torre en forma de dibujos ornamentales.
LA FIGURA DE ALDONZA
Durante la jornada del domingo, oriundos de la localidad desfilarán desde la Plaza Constitución hasta el castillo del pueblo, envueltos en trajes medievales que el propio Ayuntamiento ha ofrecido a quienes estén interesados en participar del pasacalle.
Parte de los trajes de mujer recordarán a la legendaria figura de ‘Aldonza’, una bella pastora que, según cuenta la leyenda, se ahogó en una suerte de presa conocida como ‘El charco de Aldonza’, tras vivir una historia de amor entre Hernán Galeas y el Marqués de Santillana.
En este sentido, Becerra admite que aunque la figura de Aldonza, posiblemente nunca haya existido como tal, sí que lo hicieron el Marqués de Santillana -quien se casó con la hermana del dueño del castillo de Villalba- y Hernán Galeas -quien figura en el registro de bautismo de la parroquia-.
No obstante, tal es la importancia de esta leyenda que, según el cronista local, existe una dicho en el pueblo que reza «Villalbita la chica tiene tres cosas: el castillo, la torre y el charco de Aldonza».
EP