El Ayuntamiento de Villafranca de los Barros  estudia trasladar el mercadillo a otra zona de la ciudad para compensar la reducción al 25 por ciento del aforo de vendedores ambulantes.

Así lo ha anunciado en una nota de prensa, en la que se recogen las medidas que plantea tomar y que fueron trasladadas ayer al presidente de la Asociación de Empresarios de Villafranca (ASEV), Antonio Romero, en una reunión telemática.

Otras de las medidas que quiere aprobar el equipo de Gobierno es conceder una ayuda municipal a los autónomos y pequeñas empresas que ha tenido que cesar su actividad con motivo del COVID-19.

El alcalde, José Manuel Rama, trasladó al representante de los empresarios, además, la exención de la Tasa de Ocupación de Vía Publica a los hosteleros y otros empresarios mientras que dure el estado de alarma.

En cuanto al comercio, el Consistorio quiere impulsarlo mediante una serie de medidas, que se plasmarán gracias a la firma de un convenio de actuaciones con la Cámara de Comercio y a la incorporación de un agente dinamizador, cuya contratación está subvencionada por la Junta de Extremadura.

Por último, se van a entregar mascarillas quirúrgicas a los establecimientos que han retomado la actividad en esta fase cero de la desescalada, «como medida de apoyo al sector comercial y empresarial».

El alcalde invitó a los empresarios a participar en la elaboración de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana, cuyos trámites se paralizaron por la crisis sanitaria.

Por su parte, los empresarios de Villafranca han solicitado la creación de una comisión de seguimiento de las diferentes medidas, para lo que el alcalde se comprometió a realizar reuniones telemáticas periódicas.