El Grupo Parlamentario Unidas por Extremadura ha registrado este jueves una enmienda de totalidad a los Presupuestos Generales de Extremadura (PGEx) para 2024 en la que pide su devolución por tener las primeras cuentas del gobierno presidido por la ‘popular’ María Guardiola un planteamiento central «manifiestamente injusto e ineficaz».
«Las recetas plasmadas en el primer presupuesto del gobierno de las derechas suponen una continuidad de la herencia más negativa que nos han legado los anteriores gobiernos regionales, una profundización de otras y una introducción de otras que, lejos de situarnos en el camino necesario para afrontar la despoblación, el paro y la precariedad y, en definitiva, los grandes males de esta región, nos dirige hacia otro futuro que puede ser aún más oscuro», ha manifestado Unidas en su enmienda.
Por ello, este grupo ha indicado que, frente a la pretensión de «competir con otras regiones que abanderan el modelo económico de los paraísos fiscales», esta ley de presupuestos puede ser el «primer paso» de una política que «vacíe» las arcas y «deteriore» los servicios públicos «sin conseguir en cambio la tan añorada atracción de capitales».
En la enmienda, recogida por Europa Press y que firma la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, se destaca que Extremadura pasa por una serie de situaciones fruto, en la mayoría de los casos, de tendencias que se alargan en el tiempo y que requieren una «apuesta decidida por su superación».
«Las recetas aplicadas históricamente por los gobiernos del PSOE no han sido eficaces a la hora de abordar esa tarea. A pesar de nuestro escepticismo previo, nos hemos acercado con interés a la propuesta que hace el nuevo ejecutivo extremeño, pero tras los anuncios nos encontramos en resumen con una profundización de las políticas que han llevado a Extremadura al lugar que ocupa actualmente», ha señalado.
IMPLEMENTAR POLÍTICAS «NEOLIBERALES»
Asimismo, Unidas por Extremadura ha asegurado que definir los presupuestos con el adjetivo de «los más sociales de la historia» es «todo un clásico en esta materia», aunque para ser cierto deben soportar al menos un «somero análisis».
En este caso, como ha recalcado, la «verdadera intención» del nuevo gobierno es implementar las políticas «neoliberales que están en su razón de ser», algo de lo que dieron «claras señales desde el inicio de la legislatura con un decreto de medidas fiscales que suponía un auténtico chollo para la minoría más pudiente de la región y un pequeño caramelo envenenado para la mayoría de la población que se mueve entre las rentas medias y bajas».
Por ello, y en coherencia con esta visión, la Junta ha presentado un presupuesto que «profundiza en la injusticia fiscal» y que contrasta con la exigencia al Gobierno central de un aumento de las transferencias, y que se da en un contexto de aumento de la desigualdad y el riesgo de pobreza fruto de la inflación y el encarecimiento de los productos básicos, justo cuando la sociedad requiere de un «esfuerzo extra en las políticas redistributivas» por parte de los poderes públicos.
EP