El presidente provincial ha apuntado que es «tiempo de mostrar unidad y la solidaridad del pueblo extremeño con todos los afectados»

Ya está en tierras valencianas la expedición de bomberos del CPEI de Badajoz, desplazados para colaborar en las labores de rescate de las personas desaparecidas con motivo de la DANA.

La expedición pacense está formada por 13 efectivos. En concreto, son 10 bomberos especialistas en rescates con cámaras especiales y equipos de búsqueda. Más 2 bomberos rescatadores con sus perros y 1 bombero especialista en logística, ya que la expedición de la Diputación de Badajoz será autosuficiente, pues llevan comida, camas, comunicaciones, bebida y equipos para no necesitar nada en tres días.

En principio, los bomberos de la provincia de Badajoz han ido al mando avanzado de Valencia, que se sitúa en Requena, y allí les asignarán una zona de trabajo y búsqueda concreta.

Todos los detalles del dispositivo desplazado hasta Valencia, lo ha dado a conocer el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, tras el minuto de silencio que se ha guardado a las puertas de la Asamblea de Extremadura en memoria de las víctimas de la DANA.

Unidad y solidaridad

Miguel Ángel Gallardo, ha mostrado hoy su solidaridad con todas las personas damnificadas por la DANA en Valencia, Castilla-La Mancha y otras las zonas del país afectadas. “Es tiempo de mostrar unidad y la solidaridad del pueblo extremeño con todos los afectados por esta terrible tragedia”.

El presidente provincial ha precisado que las instituciones extremeñas representadas en el minuto de silencio “estamos a disposición de aportar nuestro granito de arena para ayudar a que todos los damnificados recuperen cuanto antes su normalidad, aunque desgraciadamente muchas familias ya nunca la recuperarán ante la pérdida de sus seres queridos”.

“La tragedia es indescriptible”, ha añadido, al tiempo que ha apuntado que lo más importante en este momento “es encontrar a los desparecidos”. Asimismo, ha recordado que estos hechos reviven para los extremeños sucesos como los acontecidos en tras la riada de Badajoz y Valverde de Leganés en 1997. «Es verdad que el pueblo extremeño sabe lo que significan estos momentos de dificultad. A todos se nos viene a la memoria el año 1997 y la riada en Badajoz y Valverde de Leganés… Pues en estos momentos debemos estar con los que sufren, igual que estuvieron con nosotros cuando sufríamos», ha concluido.