El presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, ha participado este miércoles en la mesa de debate sobre la situación del efectivo en España y las necesidades de una actuación eficaz y mejores prácticas, organizada por la plataforma Denaria, donde ha presentado el plan contra la exclusión financiera puesto en marcha por la institución provincial.
Este plan ha consistido en la instalación de cajeros automáticos en municipios que se quedaron sin entidad bancaria, y que, como ha dicho, «puede ser replicado en toda España, incluso en los barrios periféricos de las capitales que carecen de servicios financieros».
El evento se ha celebrado en la sede de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y en la mesa también han participado los presidentes de la Diputación de Palencia, Mari Ángeles Armisén, y de Almería, Javier Aureliano García, que han dado a conocer otras iniciativas puestas en marcha en sus territorios para evitar la exclusión.
Un encuentro, como ha reconocido Gallardo, que demuestra que «la política local siempre une y genera proyectos que mejoran la calidad de vida de los más vulnerables» y en el que ha señalado que el citado plan empezó a fraguarse en 2017 y que entiende que la ausencia de entidades bancarias es uno de los mayores desequilibrios en el mundo rural.
«Disponer de un cajero aquí en Madrid es lo más corriente del mundo. En un pequeño pueblo de mi provincia es una necesidad», ha defendido. Y es que este servicio, garantiza el derecho de igualdad, de acceso a servicios básicos y esenciales y de libre elección del lugar donde vivir. «No por ser de un pequeño pueblo, tenemos que vernos privados de acceder a efectivo», ha asegurado.
El presidente de la institución provincial ha recordado al mismo tiempo un testimonio «clarificador» que le hizo Pepa, una vecina de Fuente del Arco, de menos de 700 habitantes, que admitía que «cada dos por tres» tenían que coger un taxi o pedir el favor a algún vecino para que les llevara a Llerena, a 15 kilómetros, para ir a sacar dinero.
Esto llevó a actuar a la Diputación de Badajoz, que trazó el plan para reducir desplazamientos y dependencia de personas mayores de terceros para ir a por dinero; algo que hizo apostando por un modelo público-privado, mediante la adjudicación de un primer contrato a Caja Rural de Extemadura.
De esta forma, desde el año 2019 se ha conformado una red provincial de cajeros que da cobertura a 35 municipios, los cuales aglutinan a 15.000 habitantes. La inversión de la Diputación ha sido de 4,2 millones de euros, según indica en nota de prensa la institución provincial.
CERCA DE 40 MILLONES DE EUROS
Estos cajeros arrojan unos resultados muy positivos, pues en estos cinco años se han realizado 350.000 operaciones por un importe cercano a los 40 millones de euros. En concreto, 7,7 millones y 70.000 operaciones al año.
Se trata de «auténticas» oficinas bancarias al aire libre y el servicio más demandado es la retirada de dinero efectivo, aunque estos cajeros de última generación permiten realizar muchas más operaciones, como el pago de recibos y tasas, ingresar dinero o recargar el móvil.
Miguel Ángel Gallardo ha recordado que la Diputación de Badajoz presentó esta iniciativa en el Senado en septiembre de 2020, y hoy está en tramitación parlamentaria en el Congreso una ley estatal con amplio consenso del 90 por ciento de los partidos. De hecho, varias diputaciones de España se interesaron por la iniciativa, ha reconocido.
Unos cajeros que, como ha apuntado, han incidido además en la economía local, pues con efectivo se puede comprar en las tiendas, en los bares y se beneficia también al turismo.
Del mismo modo, ha apuntillado que durante el primer mes se hicieron cursos de formación, dirigidos sobre todo a la población más mayor, y de cara a que se les diera unas pautas para el uso de cajeros. En este sentido, la mayoría de municipios donde se han instalado los cajeros se encuentran entre los que tienen un porcentaje mayor de población con más de 65 años de la provincia.
Asimismo, ha señalado que la situación de exclusión sigue estando vigente, pues se ha producido un agravamiento en más de un 40 por ciento. En concreto, si en 2019 había 25 municipios en la provincia sin cajero, en este año la cifra está ya en los 35 y la diputación pacense ha cubierto su demanda.
«En definitiva, gracias a la institución provincial ningún municipio se encuentra en situación de exclusión en la provincia de Badajoz. Al revés, se ha conseguido la inclusión plena», concluye el comunicado.