EP- El alcalde de Cáceres, Rafael Mateos, se ha referido a la Noche del Patrimonio, que ha tenido lugar este pasado sábado, como un «éxito absoluto» y una «buena muestra» de cómo será el diseño del proyecto de la ciudad como Capital Europea de la Cultura en 2031.
La Noche del Patrimonio, que ha sido celebrada de manera simultánea entre las quince ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, abrió al público una treintena de edificios emblemáticos y museos de Cáceres, siendo los enclaves más visitados el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, con 6.000 visitantes, el Palacio de Mayoralgo (3.800 visitantes), la Torre de las Cigüeñas (2.700 visitantes), el Palacio de los Golfines de Abajo (2.150 visitantes) y el Ayuntamiento (2.000 visitantes).
El consistorio cacereño también ha destacado en nota de prensa la afluencia de público a la veintena de actividades culturales y artísticas que se celebraron en diferentes espacios, entre las cuales destacaron el concierto de la Orquesta de Extremadura en la Plaza Mayor y el espectáculo ‘Dark Flama’, que llenó la Plaza de San Jorge de colorido, efectos especiales, acrobacias aéreas y circenses en torno a la figura del dragón luchando contra diosas y dioses mitológicos.
Concretamente, la Noche del Patrimonio se celebró desde las ocho de la tarde hasta la medianoche, y se estructuró en tres secciones: Abierto Patrimonio, Vive Patrimonio y Escena Patrimonio.
De este modo, ‘Abierto Patrimonio’ abrió la mayoría de los monumentos y edificios de interés cultural del entorno monumental pudiendo visitarse libremente desde el Ayuntamiento hasta, por primera vez, el Palacio de los Golfines de Abajo.
Se sumaron a esta noche de puertas abiertas ermitas como la de las Candelas, la Paz, San Antonio y el Amparo, la concatedral y la Preciosa Sangre, el Museo Casa Pedrilla, el Museo de Cáceres, el Palacio Toledo- Moctezuma, el Palacio de Camarena, el de Carvajal, la Escuela de Bellas Artes Eulogio Blasco, la Torre de las Cigüeñas, la Fundación Mercedes Calles, la Sala de Arte El Brocense, el Parador, así como espacios culturales privados como la sala Belle Artes, la galería Kernel, la Taberna Sir Lancelor o La lente y el pincel.
ACTIVIDADES Y ESPECTÁCULOS
Por su parte, Vive Patrimonio propuso más de una veintena de actividades entre exposiciones, espectáculos musicales, de artes escénicas o literarios.
De este modo, aparte del concierto de la Orquesta de Extremadura y del espectáculo retro-medieval ‘Drak Flama’, el Conservatorio profesional de Danza preparó un recital en el Foro de los Balbos; el jardín del Palacio de Carvajal acogió un concierto del Ensemble de Metales del Conservatorio Oficial de Música Hermanos Berzosa, y la FEMAE; el grupo de folk Trébol actuó en las Claras, San Mateo y el Ayuntamiento; el Museo Helga de Alvear acogió una nueva dj session, y en la Filmoteca de Extremadura se proyectó una joya sobre los orígenes del cine: ‘¡Lumière! Comienza la Aventura’.
También La Noche del Patrimonio diseñó una actividad específica para los más pequeños en el taller de artesanía Girasoles, donde aprendieron a realizar marcapáginas, llaveros y colgantes.
Al pie de la Torre de Bujaco hubo una muestra de editoriales, donde se vieron los últimos trabajos publicados por Tau Editores, Ediciones Liliputienses, Editorial La Moderna, Habla de Arte, Norbanova y Letras Cascabeleras.
También tuvo su protagonismo la Virgen de la Montaña por el centenario de su coronación canónica, en tanto que se pudo visitar una exposición conmemorativa en el Palacio de la Isla en la que, a través de documentos, objetos y fotografías, se rememoró la fecha en la que Cáceres coronó a su Patrona, declarándola Reina de la ciudad.
Igualmente en La Lente y el Pincel se pudo ver la ‘Exposición Filatélica y Documental: Pinceladas históricas en torno a la Virgen de la Montaña. Otra visión del Centenario’.
Por último, Escena Patrimonio, la sección que vino de la mano del Grupo de ciudades Patrimonio de la Humanidad directamente, trajo a Cáceres ‘Voltar, voltar’, de Aurora Bauzà y Pere Jou y la participación del Coro de Cámara de Beja en el Palacio de Camarena, en la sede del Colegio de Arquitectos.