Junto a la consejera de Salud, resalta la labor «fundamental» de las farmacias rurales de la región «más allá de la dispensa de medicamentos»
La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha inaugurado el ‘Programa de Puntos de Cardioprotección en el Ámbito Rural de Extremadura’ con la instalación de un desfibrilador en la farmacia de Aljucén, en la provincia de Badajoz. Este programa, pionero en España, es fruto de un convenio entre la Junta, el Servicio Extremeño de Salud (SES) y los colegios oficiales de farmacéuticos de Cáceres y Badajoz, y busca instalar desfibriladores en unas 200 farmacias rurales de la región.
Guardiola, acompañada de la consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara Gª Espada, ha destacado la importancia de este programa, afirmando que «cada minuto que una persona en parada cardiorrespiratoria no es reanimada disminuye su supervivencia un 10%. Por eso, es crucial desplegar esta red en los municipios más pequeños».
El Gobierno regional destinará 500.000 euros a este proyecto en localidades de menos de 1.000 habitantes donde no existe un punto cercano de cardioprotección. Además, los farmacéuticos y el personal de las oficinas de farmacia recibirán formación de los colegios de farmacéuticos para asegurar que puedan ofrecer la primera atención necesaria hasta que lleguen los servicios médicos.
El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Badajoz, Cecilio J. Venegas, ha subrayado que «Extremadura es pionera en España al ser la primera comunidad en desarrollar un proyecto integral de cardioprotección en el mundo rural».
Por su parte, Juan José Hernández, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cáceres, ha explicado que «el 60% de las farmacias en Extremadura están en zonas rurales, lo que hace de este proyecto una necesidad vital».
El alcalde de Aljucén, José Antonio Carmona, ha mostrado su agradecimiento por contar con este servicio y ha resaltado la importancia de esta medida para la salud pública en las pequeñas localidades.
María Guardiola también ha agradecido la colaboración de los colegios de farmacéuticos, afirmando que «han mostrado sensibilidad hacia nuestras zonas rurales, especialmente hacia los municipios más pequeños». Asimismo, ha reconocido la labor de los farmacéuticos rurales, destacando su vocación y cercanía.
«Gracias a farmacéuticos como Elisa, que con su vocación y cercanía ofrecen más que medicamentos. Su labor es fundamental para nuestros pueblos más pequeños», ha concluido, en referencia a la titular de la farmacia donde se ha instalado el desfibrilador.