2024 batió el récord de agresiones a médicos con 847 incidentes. En más de la mitad de los casos las víctimas son mujeres y crece el número de incidentes en Atención Primaria y en las consultas privadas.
Percibe la Organización Médica Colegial un nexo entre la crispación y el lenguaje agresivo que muestran los políticos y lo que ven en las consultas. «El diálogo claramente se ha deteriorado, -señala Tomás Cobo, presidente del Consejo General de Colegios de Médicos- el insulto reemplaza al argumento y el respeto se ha ido desplazando hacia la crispación constante. Y esa crispación y ese lenguaje tan agresivo se traslada a la sociedad. Si los que verdaderamente nos tenían que dar ejemplo y sobre todo a los chavales, a los más jóvenes, ven eso con normalidad, eso se traslada a la vida diaria, porque eso no solo son los médicos, es también las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, son los maestros, son los militares, son todos aquellos que tenemos vocación de servicio a los demás».
Una agresión cada diez horas
La realidad es que 2024 ha marcado el máximo de agresiones -físicas y verbales- en las consultas médicas. Desde la creación, en 2010, del Observatorio Nacional de Agresiones, se han notificado 8.108 agresiones. Una de cada diez tuvo lugar el año pasado. «Las 847 agresiones registradas suponen que cada diez horas se agrede a un médico en nuestro país», señala la OMC.
Analizando los datos se observa que el 62,40% de las agresiones corresponde a mujeres, como viene siendo tendencia en los últimos años. Y hay un repunte de incidentes en Atención Primaria. Tras las causas destaca principalmente la discrepancia con la atención médica recibida. Tras ella las diferencias en el ámbito personal y los informes no acordes con las pretensiones junto a los asuntos relacionados con la incapacidad temporal. Dentro del apartado de causas estructurales del sistema, es decir, aquellas no relacionadas con la atención médica, aumentan las agresiones por retraso en el tiempo de ser atendido.
Aumentan las agresiones en consultas privadas
De todas las agresiones recibidas y comunicadas acabaron en baja laboral el 14%, un punto más que el año pasado. El 95% de las agresiones se produjeron en horario y entorno laboral; afectan sobre todo a facultativos entre los 36 y los 45 años y aunque mayoritariamente se dan en las consultas públicas, de Atención Primaria, hospitales o urgencias, están aumentando los incidentes en el sector privado, ya representan el 17% del total.
El perfil del agresor sigue siendo el de un paciente con cita programada (46,5 %), seguido de los no programados (32 %), acompañantes (19,8%) y desplazados (1,7 %). Algo más de la mitad tienen entre 40 y 60 años y un tercio menos de 40.
Hemos pasado de los aplausos a las ocho a las agresiones
Insisten los médicos en que las agresiones no se dirigen exclusivamente a ellos «está afectando a todos los profesionales de la salud. -ha remarcado José María Rodríguez Vicente, secretario general de la Organización Médica Colegial- Vimos que en la pandemia, a las 20:00 de la tarde todo el mundo salió a aplaudir. A partir de la el cese de la pandemia, las agresiones han ido en aumento, reflejando en un aumento máximo el año pasado».