Los cuatro centros extremeños de atención integral 24 horas a víctimas de violencia sexual de la Junta, ubicados en Badajoz, Cáceres, Mérida y Plasencia, han recibido desde su puesta en marcha el pasado 31 de diciembre cerca de 60 llamadas.

En concreto, en los 27 días que llevan funcionando dichos centros, y con datos hasta el pasado viernes, día 24, se han recibido en los mismos 58 llamadas (tanto de víctimas como de profesionales), y sin que hasta ese momento se haya atendido ninguna llamada de urgencia o de emergencia activada a través del 112.

Asimismo, desde los primeros días de funcionamiento de los centros (sobre el 4 ó 5 de enero), ya se han realizado programaciones de citas para recibir y atender de forma presencial en los mismos a mujeres que así lo solicitaron.

De este modo lo ha desgranado la secretaria general de Igualdad y Conciliación de Extremadura, Ara Sánchez Vera, en una comparecencia este lunes en comisión en la Asamblea a petición propia para informar sobre la situación actual de los centros de atención integral 24 horas a víctimas de violencia sexual de la Junta.

Tras remarcar que el Gobierno de María Guardiola «ha cumplido de forma diligencia y responsable», así como en «tiempo récord» con los mandatos de Europa y de la legislación nacional, así como con el «compromiso» adquirido con la ciudadanía para la puesta en marcha de los cuatro centros dentro del plazo establecido del pasado 31 de diciembre, Sánchez Vera ha remarcado el «compromiso» de la Junta con las mujeres y su «firme empeño» por erradicar cualquier forma de violencia contra las féminas.

El servicio de gestión de los cuatro centros de crisis está encomendado a la Sociedad de Gestión Pública de Extremadura (GPEX) mediante un encargo realizado, con un coste total de 1.294.942,13 euros, con cargo a los presupuestos generales de la región para los años 2025 y 2026, puesto que el último trimestre de cada ejercicio se abona en el primer trimestre del siguiente.

De este modo, desde el pasado 31 de diciembre, mujeres y niñas extremeñas disponen de un servicio de atención integral «altamente técnico» y «cualificado» que está siendo prestado por 20 profesionales que atienden a cualquier fémina que demande información, asesoramiento, asistencia o intervención por haber sufrido un episodio de violencia sexual, ya sea de forma reciente o en algún momento de su vida, sin importar los años que hayan transcurrido y sin que sea necesario formular denuncia previa.

Además, no solamente atienden a las víctimas, sino también a todo su entorno familiar y amistades que así lo demanden por considerar que «pueden ser agentes que pueden contribuir a su recuperación».

En concreto, dos equipos de profesionales, los de Cáceres y Plasencia, lo hacen desde los propios centros, puesto que las obras se recepcionaron el día 27 de diciembre de 2024.

Mientras, los profesionales de Mérida y Badajoz trabajan durante estas primeras semanas con la fórmula del teletrabajo a la espera de que las obras finalicen y sean recepcionadas, si bien se han habilitado espacios para realizar intervenciones de forma presencial, sin perjuicio de la posibilidad que tienen los profesionales de desplazarse allí donde lo requiera la víctima.

En cuanto al centro de Badajoz, la secretaria general ha señalado que está previsto recepcionarlo dentro de dos días, el próximo miércoles 30 de enero.

Mientras, el de Mérida lo hará «en próximas fechas», cuando la empresa adjudicataria dé por finalizadas las últimas actuaciones que está acometiendo y se coordine la fecha de recepción con la inspección de sanidad para obtener la habilitación sanitaria del centro y con la intervención dependiente de la Consejería de Hacienda para realizar la recepción final de las obras.

EQUIPOS

Cada uno de los centros cuenta con un equipo de cinco profesionales (tres psicólogos, un asesor jurídico y una trabajadora social). Así, en total, se han contratado 12 psicólogos, cuatro asesores jurídicos y cuatro trabajadoras sociales.

Las 20 personas contratadas para la atención continuada de los cuatro centros de crisis aportan, además, una formación mínima de 50 horas en materia de igualdad entre mujeres y hombres o prevención y lucha contra la violencia de género y o violencia sexual.

La incorporación de las 20 personas contratadas ha estado precedida, además, por la impartición de un curso de formación «más intenso» en materia de violencia sexual.

Asimismo, del 26 de noviembre al 20 de diciembre pasados se puso en marcha en la región una campaña publicitaria para dar a conocer la puesta en funcionamiento de los centros de crisis; y próximamente se articulará otra para seguir insistiendo en la existencia de dichos servicios.

ESPACIO HUMANIZADOS

De este modo, Sánchez Vera ha incidido en que los centros de crisis nacen como espacios «humanizados, acogedores», en los que las víctimas puedan sentir que están «en un lugar de confianza», para que «todo lo que vivan y perciban durante su estancia en él, ayude a mitigar el impacto que tiene la violencia sexual sobre sus vidas».

«Los espacios proyectan ambientes de seguridad, intimidad y confidencialidad para prestar la asistencia con total confianza y garantía», ha apuntado, al tiempo que ha subrayado que el objetivo es ofrecer a la víctima un lugar en el que «encuentre bienestar para que poco a poco pueda ir reparando el impacto de la violencia sufrida».

En cada uno de los proyectos de los centros, las direcciones facultativas han puesto en valor los recursos naturales de cada emplazamiento, para lo que han incorporado los espacios naturales exteriores, permitiendo zonas ajardinadas, patios o terrazas, todo ello pensado con parámetros de economía verde y circular, apostando así por actuaciones sostenibles.

Todos los centros de crisis disponen de tres despachos para los profesionales, una sala polivalente y un recurso habitacional adoptado con zona de office, para uso de cualquier mujer que necesite pernoctar.

Además, la secretaria general ha destacado que Extremadura es «una de las pocas» comunidades autónomas que ha incluido en los centros de crisis un espacio habitacional de urgencia para las mujeres, ya que la regla general en otros territorios está siendo su «omisión».

En cuanto a la superficie, el centro de crisis de Plasencia dispone de 173 metros cuadrados; el de Cáceres 228; el de Badajoz 146; y el de Mérida 249 metros cuadrados.

PRIVACIDAD

De igual modo, se desvelará la ubicación concreta de ninguno de los cuatro centros en aras de mantener la «privacidad» y «seguridad» de las usuarias.

Así, tan sólo se le proporcionará a las mujeres familiares o amistades para que puedan acudir a solicitar información o recibir información o asistencia de forma presencial.

Al mismo tiempo, se presta atención telefónica y online, además de la propiamente presencial. En caso de que la mujer acuda físicamente al centro o el profesional se desplace hasta el lugar que acuerde con la víctima.

FORMAS DE CONTACTO

En cuanto a las formas de contactar con los centros, se puede hacer a través del 112 en supuestos de urgencia o agresión sexual inmediata; y en el caso de no emergencia a través del teléfono 900-200-206.

Asimismo, existe un número que únicamente atiende de forma telemática (639-260-016), y una dirección de correo electrónico a la que puede remitir diferentes peticiones (centrodecrisis.es). También se ha habilitado una página web alojada en el portal de la Junta.

Por otra parte, Ara Sánchez ha recordado que el pasado 18 de diciembre se firmó un protocolo interinstitucional de actuación de los centros de atención integral 24 horas a víctimas de violencia sexual en Extremadura, consensuado y firmado por la presidenta de la Junta, el delegado del Gobierno, la presidenta del TSJEx, el fiscal superior de la comunidad autónoma, y el presidente de la Fempex.