Aunque el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor, reconoce como buena la medida del Gobierno de aplazar el pago de impuestos a autónomos y pymes hasta el 20 de mayo, afirma que podría haberse aplazado hasta el 20 de julio para evitar así trámites innecesarios ya que no se sabe si en mayo seguiremos confinados.

Lorenzo Amor reprocha al Gobierno que actúe tarde y de manera improvisada ya que este miércoles es el último día que tienen los autónomos para presentar la domiciliación de impuestos.

Reconoce como buena la medida que aprobará el Consejo de Ministros, pero asegura que llega tarde porque desde hace un mes, organizaciones empresariales piden al Gobierno que aplace ese pago al 20 de julio para evitar burocracias y trámites innecesarios: «No sabemos cuándo va a terminar el estado de alarma. Lo ponen el 20 de mayo, pero no sabemos si ese día podremos acudir al banco a pagar los impuestos».

Denuncia que ahora mismo hay 850.000 autónomos que están trabajando y alrededor de 800.000 que el viernes verán reconocida su prestación por cese de actividad (al acreditar una reducción de ingresos de más de un 75%), pero que hay más de un millón y medio de autónomos que se quedarán fuera por la manera en que está diseñada la prestación.

«Es llamativo que el BOE fije para la moratoria de hipotecas y suministros -lo que no le cuesta al Estado- un 40% de índice de vulnerabilidad de los autónomos, pero para el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, el índice de vulnerabilidad de los autónomos esté en el 75%», asegura.

«Miles de autónomos están ingresados en UCI y pagan las cotizaciones»

También considera incomprensible que en un país que «presume» de apoyar a la mujer, las madres autónomas que han disfrutado de su prestación por maternidad los tres primeros meses del año van a quedar fuera de la prestación porque al estar de baja, no han tenido ingresos, y les va a ser imposible demostrar una caída de la actividad del 75%.

Asimismo, ve «inadmisible» que por ejemplo haya miles de autónomos ingresados en hospitales y UCI con coronavirus que cobrarán la baja desde el primer día, pero tendrán que pagar de 280 a 300 euros de cotización a la Seguridad Social a menos que el Consejo de Ministros lo rectifique en los próximos días.

Se muestra muy crítico con el Gobierno al que acusa de no hablar ni escuchar. Afirma que la última vez que habló con el ministro Escrivá fue el 24 de febrero y con la ministra Calviño el 11 de marzo. Con Yolanda Díaz se reunió este lunes después de un mes y le planteó todas las inquietudes del colectivo, a lo que la ministra respondió que lo trasladaría al Consejo de Ministros.

Por eso, se muestra a favor de un acuerdo común para salvar la economía tras la crisis del coronavirus, pero se pregunta a qué pactos se refiere el Gobierno: «Si no están hablando con los autónomos».

«Lo que no sé es si estos acuerdos son sinceros, porque hablar de acuerdos cuando los autónomos llevamos un mes sin hablar con el ministro que lleva estos temas, es llamativo», asegura.