El incendio se originó por la explosión de un móvil que estaba cargando en la planta inferior.
El incendio en la localidad sevillana de Guillena ha conmocionado a España. Cuatro personas de una misma familia fallecieron en un trágico suceso provocado por la explosión de la batería de un teléfono móvil que estaba en carga. Según informó la Guardia Civil, el incendio se originó en la planta baja de la vivienda, en el salón, donde se hallaron los restos del móvil sobre un sofá, lugar donde comenzó el fuego. Este terrible incidente ha generado una pregunta: ¿Es realmente peligroso cargar el móvil?
¿Es peligroso cargar el móvil?
El uso de dispositivos electrónicos, como los teléfonos móviles, se ha convertido en parte esencial de la vida diaria. Los cargamos de manera regular, a menudo por la noche, sin ser conscientes del riesgo que puede suponer. Aunque la probabilidad de que un móvil cause un incendio es baja, la realidad es que no es un riesgo inexistente. Todos los aparatos eléctricos, incluidas sus baterías y cargadores, conllevan cierto grado de peligro de incendio, especialmente si no se usan de manera adecuada.
El riesgo de sobrecalentamiento
Uno de los principales problemas al cargar dispositivos como los móviles es el sobrecalentamiento. Este ocurre cuando un aparato continúa cargándose a pesar de haber alcanzado el 100% de batería. Aunque los dispositivos modernos suelen tener mecanismos de seguridad para evitar este tipo de situaciones, en algunos casos pueden fallar, provocando un aumento de temperatura que podría derivar en un incendio, como ocurrió en Guillena.
Es particularmente arriesgado cargar el móvil durante la noche, mientras dormimos, ya que no podemos controlar el dispositivo ni intervenir si detectamos algún fallo o signo de sobrecalentamiento. De hecho, algunos informes recomiendan que los dispositivos se carguen bajo supervisión, para poder desconectarlos en cuanto alcancen su carga máxima, reduciendo así el riesgo de que ocurra un accidente.
Cargadores de baja calidad: un peligro añadido
El uso de cargadores no oficiales o de marcas de dudosa procedencia aumenta el riesgo de incendio. Estos cargadores pueden no estar sometidos a los mismos estándares de seguridad que los originales, y esto puede generar fallos durante el proceso de carga, como el sobrecalentamiento o cortocircuitos. En el caso de Guillena, no se ha especificado si el cargador utilizado era el original o uno genérico, pero este factor es algo a tener en cuenta.
¿Cómo prevenir este tipo de incendios?
Aunque es imposible eliminar por completo el riesgo, sí es posible tomar precauciones para minimizarlo. Aquí algunos consejos:
Utilizar siempre cargadores originales o de marcas confiables. Los cargadores no oficiales pueden no cumplir con los estándares de seguridad adecuados.
Evitar cargar los dispositivos durante la noche. Aunque es tentador cargar el móvil mientras dormimos, es más seguro hacerlo mientras estamos despiertos y atentos a cualquier señal de sobrecalentamiento.
Desconectar el cargador cuando el dispositivo esté completamente cargado. Esto evitará que el móvil continúe recibiendo energía innecesaria, lo que puede causar un sobrecalentamiento.
Mantener los dispositivos sobre superficies no inflamables mientras se cargan. Colocar el móvil en lugares como camas o sofás puede ser peligroso, ya que estos materiales se incendian fácilmente si el dispositivo se sobrecalienta.
Revisar regularmente el estado del dispositivo y la batería. Si el móvil ha sufrido golpes o caídas, es importante comprobar que no haya daños en la batería, ya que esto puede aumentar el riesgo de explosión