María Concepción Spínola y González-Cocho, madre de Miguel Báez ‘El Litri’ y esposa de Miguel Báez Espuny, ha fallecido a los 71 años en Madrid como consecuencia de un infarto, apenas dos semanas después de la muerte de su esposo. El extorero ha tenido que enfrentarse a la pérdida de sus progenitores en un corto espacio de tiempo y mientras se encontraba de luna de miel con su segunda esposa, Casilda Ybarra.

Los restos mortales de Concha están siendo velados en el Tanatorio San Isidro de Madrid, donde tiene lugar la capilla ardiente antes del último adiós. En la capital de España se oficia este martes una misa y está previsto que el funeral se celebre el miércoles en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Consolación de Azuaga, indican a HOY fuentes familiares.

La biografía de la madre de Miguel Báez ‘El Litri’ está vinculada a esta localidad extremeña de unos 8.000 habitantes. En ella se asentaron sus antepasados allá por el siglo XVII, y allí nació su padre, Máximo Spínola Carrascal, íntimo amigo de don Juan, padre el Rey emérito.

Concha estudió en un internado suizo y perdió contactos con Azuaga siendo muy joven debido a su temprano matrimonio con el torero. En 1967, cuando solo tenía 18 años, se casó con Miguel Báez Espuny, que llegó a torear en el coso azuagueño.

La boda de Concha y El Litri tuvo lugar en el Monasterio de Guadalupe, donde la novia lució un vestigo de Balenciaga ante la patrona de Extremadura. Del matrimonio nacieron tres hijos: Rocío, Miriam y el famoso torero Miguel Báez ‘El LItri’, quien heredó el oficio de su padre, además del apodo.

Su único hijo varón también eligió Extremadura para su primera boda con Carolina Adriana Herrera, celebrada en 2004 en la finca Los Guateles de Aliseda, entonces de su propiedad. Allí se unió en matrimonio con su ya exesposa y madre de sus tres hijos. Posteriormente el diestro vendió el terreno de 1.400 hectáreas al magnate mexicano Alberto Bailleres.

A Azuaga volverán ahora los restos mortales de su progenitora. Un deceso totalmente inesperado para sus familiares, que aún trataban de reponerse de la pérdida de su esposo, Miguel Báez Espuny. Concepción descansará en el panteón que su familia, los Spínola González-Cocho, comparte con sus parientes De la Cueva Spínola.

Conchita, como la conocían sus más allegados, prácticamente solo regresó a la localidad del sur de Badajoz para asistir a funerales. En el panteón familiar reposan los restos de su padre, fallecido en 1980. Su madre, Julia González-Cocho Soldevilla, recibió sepultura en Valladolidad.

Su hermana Mayte Spínola, artista y mecenas, es de los cuatro hermanos (Mayte, José Antonio, Concha y Carmen) la que mayor vinculación ha mantenido con la localidad pacense, al igual que la hija de ésta, Mayte Barreiros Spínola.

La presencia de los Spínola en Azuaga se remonta a 1640. Procedente de Génova, Juan Bautista Spínola (marqués de Spínola) viajó a España para ayudar al rey de España y cayó herido y trasladado hasta la localidad extremeña. Allí se enamoró y fundó una familia, estableciendo casa y hacienda.

En 2007 el apellido volvió con fuerza a la localidad pacense, al instalarse en la casa de cultura el Museo de Arte Contemporáneo Casa Spínola, con una rica colección de cuadros y esculturas del Grupo pro Arte y Cultura que dirige Mayte Spínola. De esta forma, el que fuera antiguo solar de los Spínola, volvía a entroncar a través del arte con esta familia extremeña de gran solera.