El director general de Infraestructuras Rurales, Patrimonio y Tauromaquia, José María Sánchez Cordero, planteó la posibilidad de «quitarle la propiedad» del pantano de Alcántara a Iberdrola para «detraer» y compartir el agua embalsada y dedicarla a riego.
La Junta de Extremadura ha precisado que no va a proponer al Estado ningún cambio en la explotación de la presa de Alcántara porque se trata de una concesión que se dio por parte del Estado por 99 años y la misma finaliza en 2061.
De este modo sale al paso de las declaraciones efectuadas por el director general de Infraestructuras Rurales, Patrimonio y Tauromaquia, José María Sánchez Cordero, que ha planteado la posibilidad de «quitarle la propiedad» del pantano de Alcántara (Cáceres) a Iberdrola para «detraer» y compartir el agua embalsada y dedicarla a riego.
«Esto a lo mejor me cuesta un disgusto, pero me da igual decirlo», ha asegurado el director general extremeño, que ha comparecido en la Comisión de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Asamblea, para responder, entre otras cuestiones a la campaña de riego.
El Ejecutivo regional ha indicado, en una comunicado, que la presa de Alcántara es una infraestructura construida en los años 60 con fondos privados de la antigua empresa Hidroeléctrica Española y, a cambio de esto, el Estado le otorgó la concesión del aprovechamiento hidráulico para generar energía eléctrica.
Ha añadido que esta concesión tiene el tratamiento de integral porque, además de la presa de Alcántara, Hidroeléctrica Española construyó las de Cedillo, Torrejón y Valdecañas.
Del mismo modo, la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural aclara que la competencia sobre el uso del agua de la cuenca del Tajo no es autonómica, sino estatal, por lo que la utilización que se haga de esta agua es decisión del gobierno de España.