La Guardia Civil instruyó diligencias a un ciudadano portugués y a un vecino del municipio  de Azuaga, por un supuesto delito de caza furtiva.

La Patrulla del SEPRONA de la Guardia Civil de Castuera, dentro de los dispositivos de servicio establecidos para la prevención de acciones delictivas relacionadas con el ejercicio cinegético de la caza, venía sospechando que en el paraje conocido como “La Llamada del término municipal de Peraleda del Zaucejo, se podrían estar llevando a cabo acciones de caza furtiva.

El pasado lunes, cuando realizaban vigilancia en torno a la finca, tras escuchar varias detonaciones, los agentes sorprendieron a dos cazadores cuando abandonaban el predio, logrando interceptar  a uno de ellos, un ciudadano portugués al que se le intervino el arma que portaba, un rifle, al que se encontraba acoplado un silenciador, un visor térmico,munición, así como una mochila donde ocultaba dos hocicos de los jabalíes que acababan de abatir.

En la inspección del lugar, se pudo hallar los cuerpos de cinco jabalíes abatidos, animales a los que tras darles muerte les habían cortaron los hocicos.

Posteriormente con las gestiones practicadas, se pudo averiguar la identidad del coautor de la acción delictiva, un vecino de Azuaga quien huyo al ser sorprendido.

Ante los citados hechos y pruebas incriminatorias, se localizó al azuagueño, instruyéndoles diligencias a ambos por un supuesto delito contra la flora y fauna por furtivismo, al encontrarse cazando ilegalmente sin autorización previa del coto.

Diligencias que han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Castuera.