(EFE).- El fiscal Superior de Extremadura, Francisco Javier Montero, ha señalado este jueves, sobre el asesinato de la educadora social de Badajoz, que la causa judicial está «en una fase muy primigenia», en la que hay que dirimir el rol de participación en la muerte de cada uno de tres menores detenidos, «puesto que eso afecta a sus posibles responsabilidades penales».
Así lo ha trasladado Montero a los medios en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) en Cáceres.
“Se ha recibido el atestado antes de ayer y por lo tanto estamos en fase muy primigenia”, pero ha aclarado que el “procedimiento es rápido”, ya que “tiene unos tiempos más cortos que con procedimientos de mayores de edad”.
Por lo tanto, “ahora lo que se empezará a hacer es la investigación propiamente dicha”.
“Es decir -ha precisado-, determinar la verdad material de los hechos: qué ocurrió, cómo ocurrió y, muy importante, el rol de participación” de cada uno de los tres menores involucrados en el suceso, dos chicos de 14 y 15 años y una de 17 años.
Montero ha explicado que esto se acompañará de “informes técnicos, psicológicos y sociales de los menores”, puesto que la legislación de menores “tiende también a la reinserción, a la reeducación de los menores, al castigo, evidentemente, que es compatible”.
“Por lo tanto, tenemos que conocer todas esas circunstancias personales que han influido a la hora de incluso determinar la sanción que se puede imponer”, ha concluido el fiscal.
Menores
Dos de los tres menores internados en régimen cerrado por el asesinato de la educadora de Badajoz, en concreto el chico de 14 años y la joven de 17 años, han negado su participación en esta muerte violenta, han informado a EFE fuentes judiciales.
Ambos menores junto al tercero, de 15 años, han declarado en la Fiscalía de Menores de Badajoz, después de que el Juzgado de Instrucción número 1 de la capital pacense adoptara este martes la medida cautelar de internamiento en régimen cerrado para los tres.
Las diligencias judiciales abiertas se siguen por los presuntos delitos de homicidio, robo con violencia y contra la seguridad vial, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
Ante la Fiscalía de Menores, el chico de 14 años y la joven de 17 han asegurado no tener relación alguna con el asesinato de la auxiliar técnico educativa.
Las mismas fuentes jurídicas no han aportado información sobre lo declarado por el tercer menor.
La auxiliar técnico educativa fue asesinada en la noche del pasado domingo en la vivienda donde esa noche tenía su turno de trabajo y en la que residían los tres menores en régimen abierto.
Tras la agresión mortal, los tres menores cogieron las llaves del coche de la víctima y condujeron en dirección a Mérida. Sin embargo, tuvieron un accidente de tráfico a la altura del municipio pacense de Lobón, a unos 30 kilómetros de la capital extremeña.