EP – El número de armas destruidas en la Comandancia de Cáceres se ha incrementado progresivamente durante los últimos años, y en el periodo histórico de 2007 a 2025 se han destruido cerca de 14.000 armas.

Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Cáceres, han llevado a cabo la destrucción de 1.019 armas que, por diferentes motivos, se encontraban depositadas en las distintas intervenciones de Armas y Explosivos de la provincia.

Entre las armas reducidas a chatarra se encuentran las de propiedad particular cuyos propietarios han solicitado su destrucción, aquellas cuya destrucción ha sido decretada por la Autoridad judicial o administrativa, o las depositadas a disposición de particulares una vez transcurrido el plazo máximo de depósito.

También se encuentran aquellas armas incluidas como prohibidas por carecer de marcas, números o punzones obligatorios de un banco oficial de pruebas, según lo establecido en el vigente Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Armas.

El peso de todas las armas destruidas ha arrojado un total de 2,7 toneladas (2.780 kilogramos), de las que mayoritariamente eras escopetas e incluyéndose en menor medida rifles, carabinas, pistolas, revólveres, armas de aire comprimido, detonadoras, armas blancas y de otros tipos, según informa la Guardia Civil en nota de prensa.

Señala que el número de armas destruidas en la Comandancia de Cáceres se ha incrementado progresivamente durante los últimos años, y en el periodo histórico de 2007 a 2025 se han destruido cerca de 14.000 armas.

El proceso de destrucción se ha llevado a cabo «bajo un estricto control», ya que los agentes de la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Cáceres, trasladaron las armas a una empresa de fundición de acero para convertirlas en chatarra mediante un proceso de fundición.