Con la nueva normativa se dará un impulso al vehículo conectado, que es el gran salto desde el punto de vista de la seguridad vial para la Dirección General de Tráfico
Los dispositivos luminosos de emergencia en los vehículos (conocidos como señal V-16) sustituirán a los triángulos reflectantes de preseñalización de peligro. Estas luces de emergencia se colocan en la parte superior del vehículo averiado en carretera o ciudad.
Se trata de una baliza con luz destellante y dotada de conectividad para colocar en el techo del vehículo en caso de avería, emergencia o siniestro. Permite señalizar la posición en esas situaciones sin necesidad de salir del coche, lo que evita riesgos personales de ser arrollado.
El cambio de los triángulos por las luces de emergencia figura en un real decreto del Gobierno que regula las condiciones en que desempeñan sus funciones los servicios de auxilio en las vías públicas, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) en marzo de 2021. Estos nuevos dispositivos serán obligatorios dentro de un año, a partir de enero de 2026, y con ello se dará un impulso al vehículo conectado, que es el gran salto desde el punto de vista de la seguridad vial para la Dirección General de Tráfico (DGT).
El Reglamento General de Vehículos obliga desde 1999 a colocar triángulos o dispositivos de preseñalización de peligro (denominados V-16), concretamente «uno por delante y otro por detrás del vehículo o la carga, como mínimo a 50 metros de distancia y en forma tal que sean visibles desde 100 metros, al menos, por los conductores que se aproximen», en tanto que «en calzadas de sentido único, o de más de tres carriles, bastará la colocación de un solo dispositivo, situado como mínimo a 50 metros en la forma anteriormente indicada».
La nueva señal V-16 es un dispositivo de color amarillo auto que se puede colocar en el techo o la parte más alta posible del vehículo inmovilizado y comunicará su activación y desactivación vía geolocalización a un sistema por el que se conecta tanto Tráfico como otros vehículos cercanos, que estarán avisados de que se acercan a un coche averiado en carretera.
La DGT apuesta por la luz de emergencia porque la colocación de los triángulos conlleva tener que salir del vehículo, lo que expone a un mayor riesgo de sufrir un accidente. Entre 2018 y 2020, 42 personas fallecieron en vías interurbanas tras haber bajado del vehículo.
La plataforma DGT 3.0 recibe desde hace un año las señales con las ubicaciones de los vehículos que tienen alguna incidencia en la carretera y cuyos conductores han colocado la luz de emergencia conectada en la parte superior del vehículo con el fin de avisar al resto de usuarios de la vía de su presencia.
ondacero.es