La líder del ejecutivo extremeño asegura que se quiere seguir avanzando en lo que ya hemos iniciado, que es una política fiscal amable, una política fiscal que, desde luego, no hostigue al contribuyente.
La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha calificado los Presupuestos Generales de Extremadura (PGEx) para el 2025 como una «gran oportunidad» para la región y ha considerado que «sería una pena» que tuvieran que quedarse «en un cajón» por «cálculos electoralistas» o por cuestiones que «nada tienen que ver con Extremadura».
«Queremos seguir avanzando en lo que ya hemos iniciado, que es una política fiscal amable, una política fiscal que, desde luego, no hostigue al contribuyente, que era lo que venía sucediendo en nuestra región, sino siendo más eficiente», ha señalado, junto con que desde el gobierno autonómico han «aliviado» las economías familiares y han conseguido «en tan solo un año», este último, ser la región que más ha bajado los impuestos de todo el país. «Hemos escalado ocho puestos en el ranking de competitividad fiscal».
Para Guardiola, está «claro» que Extremadura «necesitaba un nuevo empuje», así como «más determinación» o «ambición», y sobre esta última ha matizado que una «a la altura del talento, del esfuerzo y de la capacidad de los extremeños, porque fallaban las recetas, pero teníamos los mejores ingredientes posibles». Asimismo, ha sostenido que la región «llevaba demasiado tiempo instalada en una política de dejadez, de inacción, de apatía» y que «sin escuchar, tampoco se puede conseguir absolutamente nada».