- En lo que va de año, en la zona de Mérida hay más de 120 denuncias
- Se propone realizar un trabajo continuado con jóvenes desde la sensibilización e información y reconocimiento de las diferentes violencias.
- También se propuso el realizar mesas de trabajo más específicas de las diferentes manifestaciones de las violencias hacia las mujeres
En la jornada de ayer se reunió la Mesa de Coordinación local de Violencia de Género a la que han asistido el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, y la delegada de Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres, Ana Aragoneses Lillo quien, a partir de ahora, presidirá las próximas reuniones que se celebren, por delegación del alcalde.
Han participado el Delegado de Policía Local, Felipe González, la Coordinadora de la Unidad de Violencia de Género de la Delegación del Gobierno, el inspector y policía de la FUMA de la Policía Nacional, Inspector de la policía local, y policía local viogen, Guardia Civil viogen, Psicóloga y Agente de la Oficina de Atención a las Víctimas del Juzgado de Mérida, la Psicóloga del PAP y la Agente de Igualdad de la Oficina de Igualdad, la Coordinadora de programas de Malvaluna, la Directora de la Delegación de Igualdad.
En la actualidad hay 16 Atempro activos, hay un aumento de denuncias y de órdenes de protección y se agudiza en verano y épocas festivas, fundamentalmente en mujeres de 18 a 35 años.
En materia de jóvenes hay un incremento en Violencia de Género, también en menores de 18 años, desde 2015 a 2021 han subido en un 54 % las agresiones sexuales. También se visibiliza, por parte de los recursos, un aumento de Violencia Vicaria, violencia sobre la víctima a través de los hijos e hijas.
Entre las propuestas, destaca la realización de un trabajo continuado con jóvenes desde la sensibilización e información y reconocimiento de las diferentes violencias. Lo que se ha puesto encima de la mesa es que hay que hacer un trabajo importante con los jóvenes y llevar a cabo mesas de trabajo más específicas de violencias concretas hacia las mujeres, para separar cuales son las cuestiones más directas sobre estas violencias, trabajando con las comunidades educativas, y el entorno.
Porque, como destaca la delegada, “nos preocupa especialmente cómo este tipo de violencia, en vez de retroceder, se está instalando con fuerza entre los jóvenes. Las adolescentes están muy expuestas a las nuevas formas de violencia, como el control en las redes sociales, y los jóvenes disponen de mecanismos muy potentes para ejercer ese control: la situación actual requiere de un esfuerzo mayor para atajar cuanto antes estos comportamientos.”
Además, las redes sociales y el uso irresponsable de internet exponen a los jóvenes a formas graves de vulnerabilidad y violencia como la explotación sexual o el consumo de pornografía.
Todo ello requiere de un esfuerzo mayor para atajar cuanto antes estos comportamientos: trabar por tanto en formación y educación para acabar con las desigualdades entre hombres y mujeres y erradicar la violencia machista. Con los jóvenes y su entorno (familia)