El sector de la construcción pide colaboración a la Delegación del Gobierno ante la falta de mano de obra.

El delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, se ha reunido con el presidente de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) en la región, Carlos Izquierdo, con el que ha analizado diferentes vías de colaboración del Ejecutivo Central ante los problemas a los que se enfrenta el sector de la construcción en la comunidad extremeña, entre ellas la falta de mano de obra.

En declaraciones a los medios al término del encuentro, Quintana ha explicado que han mantenido esta reunión que enmarca en el contacto «continuo y permanente», en este caso con asociaciones de empresarios y de la construcción, en la que han analizado los problemas que tienen y ante lo que, «lógicamente», se ha puesto a su disposición en aquello que puedan necesitar.

Un sector importante para Extremadura y, para ello, ve «necesario» tener ese contacto «directo y permanente continuamente», ha destacado, junto con que son «muchas» las obras que está realizando la Administración General del Estado en distintos ministerios en la comunidad autónoma y, por lo tanto, los constructores y las empresas extremeñas son «claves» para la realización y que lleguen «a buen puerto» todas esas inversiones que están realizándose.

En este sentido, Carlos Izquierdo se ha referido ante los medios a la falta de mano de obra y a la posibilidad de resolver la carencia de profesionales del sector, debido a su jubilación, a través de los inmigrantes, ante lo que ha reconocido que «al final» es un «problema de hacer atractivo al sector» y ver cómo consiguen que gente, sobre todo inmigrantes, se puedan introducir en el mismo, ante lo que ven que «quizás la solución» pase por esto último y abogan por buscar gente que quiera trabajar y formarlos.

Un problema de falta de mano de obra que es «generalista» y que lo tiene tanto el autónomo que tiene un trabajador, como quien tiene a 50, y ante lo que ha cifrado en unas 8.000 o 9.000 las personas que haría falta que se incorporaran al sector en Extremadura.

Sobre los inmigrantes, ha apostillado que «el problema gordo» lo tienen en el proceso de legalizar la situación de esas personas, porque no pueden dar de alta a nadie en una empresa «si no tiene los papeles» y estos requieren «un tiempo», pero que el sector «necesita mano de obra» y «poder hacer los trabajos» y dicha falta de mano de obra influye en la ralentización de los trabajos.

Al respecto, el delegado del Gobierno ha matizado que hay una legislación que hay que respetar, y ha destacado que España «tiene un problema» porque la entrada en Europa de migrantes está ocurriendo a través de Canarias y se tiene que ser «solidarios en este punto».

En el caso de Extremadura, ha continuado, se cuenta con un centro «importante» de acogida, «pero son personas que han entrado de manera ilegal» y que tienen que seguir los trámites «oportunos».