Dolors Montserrat asegura que “Sánchez va en dirección contraria con respecto a los 27 por culpa del sectarismo ideológico de un gobierno que prefiere seguir comprando gas a Rusia que optar por una energía limpia avalada por la UE.

  • En un momento en el que Europa ha reorientado su estrategia para afrontar los nuevos desafíos energéticos, España cierra la puerta a la energía nuclear.

 

El Partido Popular ha solicitado a la Comisión Europea que se pronuncie sobre la necesidad de mantener en el mix energético una proporción estable de energía nuclear, que evite el cierre de nuevas centrales, con el fin de mantener la seguridad y autonomía energética de la Unión Europea, así como los objetivos de descarbonización.

En una pregunta parlamentaria presentada por la Delegación, los populares denuncian que, pese a que España cuenta actualmente con cinco centrales nucleares que generan cerca del 20% de la electricidad, “las medidas adoptadas por el Gobierno español están conduciendo al cierre progresivo de todas las centrales nucleares antes de 2035”.

La portavoz de la Delegación del PP en el Parlamento Europeo y vicepresidenta del grupo EPP, Dolors Montserrat, criticó la política del Gobierno español que, por puro sectarismo ideológico, está ignorando la actual situación geopolítica que demanda, ahora más que nunca, un nuevo sistema energético más equilibrado, fiable y sostenible. “Sánchez va en dirección contraria a la estrategia energética europea por culpa de un sectarismo ideológico que le lleva a preferir el gas ruso antes que una energía limpia y verde como la nuclear”.  En este contexto geoestratégico, añade, “necesitamos un mix energético diversificado y resiliente que combine la nuclear con renovables y otras tecnologías limpias”, consideró.

El Gobierno de España dejó plasmadas sus intenciones en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), donde se prevé reducir, además, a la mitad la capacidad de generación nuclear para 2030.

“En contraste, la Unión Europea ha dado pasos significativos en apoyo a la energía nuclear. En febrero de 2022, la Comisión la incluyó en la taxonomía verde, y en febrero de 2024, la calificó como “estratégica”, indica la pregunta parlamentaria. Además, según la última evaluación de los PNIEC, nueve países extenderán la vida útil de sus centrales, once desarrollarán nuevos proyectos, y diez apuestan por los reactores modulares pequeños”, explica el escrito.

“Europa no puede permitirse debilidades en su autonomía energética. Es hora de actuar con visión estratégica y defender la energía nuclear como un pilar esencial de nuestra seguridad, prosperidad y liderazgo global”, manifestó.

Además, Montserrat recordó que la energía nuclear es una de las fuentes más eficientes de electricidad libre de carbono. “En un momento en el que la lucha contra el cambio climático es imperativa, la transición a una economía neutra en emisiones requiere una base sólida de generación estable y limpia. La nuclear complementa perfectamente a las energías renovables, proporcionando la estabilidad que estas necesitan para operar. El gobierno actúa con una ceguera ideológica muy peligrosa que, además, no nos podemos permitir”.

 El actual escenario internacional presenta desafíos sin precedentes, entre ellos, la inestabilidad del suministro energético derivada de la dependencia de gas ruso, utilizado como herramienta de presión geopolítica; el previsible viraje de Estados Unidos de sus compromisos climáticos y su política energética, así como lacreciente competencia tecnológica y económica de China.

En concreto, la Delegación popular ha planteado las siguientes preguntas:

  1. ¿Considera la Comisión Europea que la energía nuclear contribuye positivamente a alcanzar los objetivos de descarbonización y garantizar la seguridad energética?
  2. ¿Ha recomendado la Comisión Europea a algún Estado Miembro en concreto el cierre de sus centrales nucleares?
  3. ¿Cuantos Estados Miembros han notificado a la Comisión Europea su intención de cerrar sus centrales nucleares a partir de 2025?

Sánchez va en dirección contraria con respecto a los 27 por culpa del sectarismo ideológico de un gobierno que prefiere seguir comprando gas a Rusia que optar por una energía limpia como la nuclear.