El secretario general del PP extremeño, Abel Bautista, ha destacado que el Gobierno de María Guardiola ha realizado el «máximo esfuerzo» para contribuir a que la Central de Almaraz continúe operando, y ha considerado que sin su «decisión» de reducir la ecotasa a dicha instalación la petición de prórroga realizada por las empresas propietarias «no se hubiera producido nunca, jamás».
El Gobierno de la Junta de Extremadura, de María Guardiola, ha hecho lo que tenía que hacer, que es hacer el máximo esfuerzo para que Almaraz siga siendo una realidad, para que no se cierre», ha espetado, al tiempo que ha vuelto a reclamar al Gobierno central un «esfuerzo compartido» en materia fiscal para dicha central nuclear.
Así, tras incidir en que en el «esfuerzo» realizado por el Ejecutivo autonómico se encuentra la rebaja de la ecotasa hasta el 50 por ciento en tres años, condicionado a que continúe abierta la instalación, ha defendido que sin dicha «decisión» de María Guardiola «esa solicitud de prórroga no se hubiera producido nunca, jamás, porque evidentemente el escenario fiscal lastraba la actividad económica de la central nuclear de Almaraz» y «una vez hecho esto, las empresas se han tirado para adelante para pedir esa prórroga».
En todo caso, Bautista ha reclamado que «evidentemente» el «esfuerzo» no puede recaer «única y exclusivamente» en la Junta de Extremadura, sino que «tiene que estar el Gobierno de España acompañando», bajo el planteamiento de que «la colaboración institucional es fundamental».
«Aquí no se trata de ponerle palos en las ruedas a una comunidad autónoma a ver si le va peor, porque cuanto peor le vaya a un partido en una comunidad autónoma, mejor me va a mí, que es de lo que se ha tratado», ha dicho.
«Aquí de lo que se trata es que una vez que la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha dado un paso de facilitar que Almaraz continúe y finalmente se ha demostrado que así ha sido, el esfuerzo sea compartido con el Gobierno de España», ha espetado el ‘popular’, quien ha afirmado que el Gobierno de España «ha esperado a esta situación para ver si era posible no proceder a esa rebaja impositiva que le pedían las centrales».
Al respecto, Abel Bautista ha señalado que «evidentemente con una rebaja del Gobierno de España y no de la Junta de Extremadura también hubiera sido posible»; y ha ahondado en que en cualquier caso «de lo que se trataba era de aliviar la carga fiscal en base a las cinco subidas de impuestos que ha cometido el Gobierno de España en relación con las nucleares que hacían inviable el negocio no sólo aquí en Extremadura, sino también en otras partes de España».
De este modo se ha pronunciado Abel Bautista este viernes durante la visita a una empresa en Villafranca de los Barros, a preguntas de los medios después de que la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, ha afirmado que Iberdrola, Endesa y Naturgy han presentado una solicitud «sin condiciones» a la prórroga de la Central Nuclear de Almaraz tras renunciar a su petición de una rebaja fiscal a la energía nuclear.
CUPO NUCLEAR CATALÁN
Al mismo tiempo, Bautista ha lamentado que dentro de la continuidad de Almaraz se haya «terminado hablando del cupo nuclear catalán», debido a que «mientras aquí se hablaba del cierre, en Cataluña se hablaba de una fiscalidad propia, de un sistema especial que les permitiera seguir».
«En todo caso, en todas las centrales nucleares, para su continuidad siempre se ha hablado, con independencia del territorio, de que tenían que tener un mejor escenario, unas mejores condiciones para seguir. La diferencia es que en Cataluña el Gobierno de España se lo ofrecía y en Extremadura no», ha remarcado; al tiempo que ha defendido que la continuidad de Almaraz «es una cuestión de soberanía energética de todo el país».
«Y como es para nuestro país, nuestro país y nuestro gobierno tienen que estar al lado de la Junta de Extremadura para apoyar, para acompañar y para que la carga sea para ambas partes, no para una sola», insistido.
EL GOBIERNO «NO HA HECHO LOS DEBERES»
Así, ha destacado que la presidenta de la Junta, María Guardiola, se ha mantenido «insistiendo una y otra vez y dando en este sentido la matraca para que esto (el cierre de Almaraz) no se produjera», el Gobierno central se ha mantenido «inmerso en una cuestión meramente ideológica, no una cuestión económica, de empleo de la comarca de Almaraz y de toda Extremadura».
«Es que hemos estado inmersos en una guerra política ideológica que nada tiene que ver con los 4.000 trabajadores, ni mucho menos con nosotros, por cuestiones que desconocemos, pero que no se hablan en otros territorios y sí se hablan en Extremadura, desgraciadamente», ha señalado Bautista, quien ha considerado que en este asunto a los extremeños se les ha vuelto a tratar «como ciudadanos de tercera, de cuarta o de quinta, porque no representan el mismo peso en votos en el Congreso de los Diputados que representa a Cataluña».
«Cataluña llama a la puerta y yo me alegro por ellos. Llama a la puerta a Cataluña y el Gobierno se cuadra, porque tiene votos en el Congreso. Ahora, Extremadura, las empresas han tenido que pedir por carta y casi rezando que les reciba la ministra», ha lamentado; al tiempo que ha defendido que en este asunto de la continuidad de la Central Nuclear de Almaraz el Ejecutivo nacional «no ha hecho los deberes».
Así, ha insistido en que «no se puede estar a un día de entregar la documentación para el cierre y que las empresas finalmente tomen esta decisión, gracias a Dios, y por el esfuerzo de la Junta de Extremadura, que es rebajar la ecotasa para que continúen trabajando».
«No deberíamos haber llegado en ningún caso al día de hoy en esta posición, jamás, si esto se hubiera tratado con la racionalidad y la cuestión económica y de empleo de la que se trata y si hubiéramos dejado todas a un lado la parte ideológica», ha añadido.
«Nos iría muy bien a todos en el conjunto del país y eso es lo que imponemos nosotros en Extremadura, dejar a un lado las cuestiones ideológicas, las cuestiones que nos separan, las cuestiones que no aportan, y centrarnos en lo verdaderamente importante que es esto, que es pisar el terreno», ha concluido.
