El fontanés Enrique Morgado Ortiz es conocido por todos los fontaneses como “el maestro de educación física del colegio Cruz Valero”, pero su trayectoria laboral no queda solo ahí, sino que durante tres décadas ha dirigido el “Gimnasio Gran Maestre”, y entre otras funciones, ha sido Seleccionador Extremeño de Jiu-Jitsu.

A lo largo de sus años como docente, han sido muchas las entrevistas que Radio La Fuente ha realizado a Enrique Morgado, pero nunca se había hablado con él acerca de su labor como emprendedor y empresario al frente del mencionado gimnasio.

Sobre este asunto, Enrique Morgado comentó que “la idea de fundar un gimnasio va surgiendo a partir del año 1984, cuando yo estaba de maestro en Granja de Torrehermosa. Allí, llegó un señor que montó un gimnasio de judo, y yo lo practiqué y me formé en esta disciplina, y un par de años después, en 1986, al volverme cerca del pueblo decidí montar el gimnasio y empecé a dar clases de judo con la certificación pertinente, algo que en aquella época era muy difícil de gestionar, pero desde entonces ya han pasado 38 años, y el gimnasio sigue adelante”.

Enrique Morgado confesó que “en aquella época no existían los Patronatos Municipales de Deportes, los niños solo jugaban al fútbol mientras que el judo era un deporte minoritario, pero yo empecé y tuve suerte, e incluso, llegamos a formar una escuela de judo muy importante en Extremadura. Luego, más tarde, y con la ayuda de mi compañero Ángel L. González, introdujimos el jiu-jitsu, me nombraron seleccionador extremeño, al ser el único cinturón negro con certificación de entrenador, y a partir de ahí, vivimos una época muy bonita en Fuente del Maestre con varios Campeones de España, y con todos los participantes como medallistas”.

Con el paso de los años, el “Gimnasio Gran Maestre”, además del judo, también fue evolucionando en cuanto a maquinaria se refiere, ya que según contó E. Morgado, “con las olimpiadas de 1992 empecé a tener maquinaria, años más tarde volvimos a introducir más aparatos por la demanda de realizar actividad física, ya que en el pueblo no había nada para trabajar todos los grupos musculares, y en 2013, cuando mi hija Pura Morgado se puso al frente, se hizo la última gran reforma con una nueva maquinaria, la cual ha evolucionado una barbaridad, ya que antes se pedían muchos kilos, y ahora se usa mucho el fitness”.

También, en estas casi cuatro décadas, ha evolucionado la presencia de las mujeres en el Gimnasio, “afortunadamente han dado un paso adelante, cuando yo empecé eran muy reacias a venir por las prohibiciones que tenían a hacer actividad física, algo que a mí me cabreaba, pero a día de hoy, quizás que haya un 60% de mujeres y un 40% de hombres, y eso me alegra”, apuntaba el propio Enrique M.

En la actualidad, el Gimnasio “Gran Maestre”, dirigido por su hija Pura Morgado, está disponible las 24 horas de los 365 días del año, con el sistema de apertura electrónico, y ofrece entrenamientos personalizados con maquinarias, preparación para pruebas físicas de policías o bomberos, clases dirigidas de pilates, zumba y entrenamientos de musculación con ejercicios dirigidos y asesorados.

A lo largo de la entrevista, Enrique Morgado tuvo palabras de alabanza para su hija Pura M. “la cual ha seguido mi camino desde los 4-5 años, se sacó la licenciatura de educación física y aprobó la oposición de profesora, labor que compagina con el gimnasio”, y para su mujer Pura de la Cruz y el resto de su familia “han sido un apoyo importante, porque durante estos años han sido muchos fines de semana fuera de casa, y muchas horas dedicadas a esta pasión”.

Una pasión que continúa, ahora ya como hobby, ya que Enrique Morgado se sigue formando en la actividad física, “es algo que me gusta, y como siguen apareciendo nuevos sistemas de entrenamientos, yo me sigo formando, de hecho el último curso que hice lo disfruté mucho porque nos lo impartió el Profe Ortega, el anterior preparador físico del Atlético de Madrid”, señaló.

Finalmente, Enrique Morgado alabó su vida como emprendedor “porque cuando aprobé la oposición como maestro y me puse a trabajar pensaba ¿qué hago por las tardes?, yo tenía que estar activo, y además, emprender un negocio te supone tener un apoyo económico, un apoyo social, un apoyo personal…yo estoy muy contento de lo que he hecho en mi vida profesional, y si volviera a nacer, haría lo mismo, porque es algo que me gusta”.