El Barómetro Sanitario incluye como novedad en sus encuestas la percepción respecto a la igualdad de trato en la sanidad pública y la aceptación de las vacunas.

El Ministerio de Sanidad ha publicado la primera oleada del Barómetro Sanitario 2024, que realiza en colaboración con el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En la encuesta se ha añadido una nueva pregunta sobre la percepción respecto a la igualdad en el trato en la sanidad pública en función de distintos aspectos.

Los resultados deja datos de casi el 40% de los españoles percibe desigualdades en el acceso a la sanidad según la comunidad de residencia. El 36% de los españoles considera que también es «desigual» el trato según el manejo de las nuevas tecnologías que tengan las personas atendidas. Sin embargo, el nivel socioeconómico, la nacionalidad o la edad de las personas atendidas, son los aspectos en los que se percibe mayor igualdad en el trato.

En cuanto a lo referido a las opiniones de la sanidad pública, se observa cierta estabilidad en la satisfacción de la poblaciónen el sistema sanitario público que ha alcanzado 6,26 puntos sobre 10, superando levemente la puntuación del anterior año en el mismo periodo (6,14).

El 42,4% de los españoles opina que el sistema sanitario «funciona bien»

El 42,4% de los españoles opina que el sistema sanitario «funciona bien, aunque son necesarios algunos cambios». Asimismo, el 28,6 piensa que «necesita cambios fundamentales, aunque algunas cosas funcionan» y el 16,2 afirma que «funciona mal y necesita cambios profundos». Solo un 12,2 cree que «en general, funciona bastante bien».

Los aspectos mejor valorados del sistema sanitario español son los servicios de urgencias(7,51 puntos) y la asistencia hospitalaria (7,14). La satisfacción con la atención primariaaumento levemente, llegando a 6,29 en contraposición a la atención especializada que su disminuye ligeramente a 5,86 puntos.

El 25,2% asegura que alguna vez ha intentado consultar y no lo ha conseguido

Del 25,2% de españoles que solicitaron consulta sin éxito, el 13,2% no consiguió contactar con su centro de salud; el 31,1% consiguió una cita, pero para muchos días después y fue a Urgencias; y al 34,2% le dieron cita para muchos días después y no realizó la consulta. El 50,8% restante afirma no tener ningún problema para la consulta con su médico de la sanidad pública.

Respecto a la espera, el 25,1% de quienes pidieron cita fueron atendidos por su médico de Atención Primaria el mismo día o al día siguiente, el resto tuvo una espera media de 8,3 días. Además, casi el 80% de la ciudadanía fue atendida de forma presencial en AP.

Más de un mes de espera media para el ingreso hospitalario

Desde que el especialista le dijo que debía ingresar hasta que ingresó, pasó menos de un mes para el 40,6% de los españoles; de 1 a 3 meses para el 27,4% y más de 3 a 6 meses para el 16,6% de la población.

Los ingresos se desglosan en: de manera programada para cirugía o prueba diagnóstica (40,3%); enfermedad o problema de salud urgente (56,9); parto (2,8%).

Por otro lado, el 44,6% de los ciudadanos reconoce haber acudido a un servicio de urgencias de la sanidad pública en los últimos doce meses. El conjunto de servicios de Urgencias es valorado positivamente en un 76,5%.

Datos inéditos sobre las vacunas

El Barómetro Sanitario ha preguntado, por primera vez, la valoración sobre el grado de aceptación que tiene el uso de las vacunas en la población general. La aceptación de la vacunación en España es alta, a pesar de que un 36,7% considera que provocan efectos adversos en la salud.

Las tecnologías digitales para relacionarnos con el sistema sanitario

El 55,9% de las personas refiere tener algún certificado electrónico para la realización de trámites con la Administración y casi el 1% no sabe lo que es.

El 54,7% de los españoles desconoce que los médicos de una comunidad pueden consultar electrónicamente los informes clínicos en otra comunidad autónoma cuando sea necesario. En esta misma línea, el 60,4% sabe que puede retirar los medicamentos recetados por la sanidad pública fuera de su comunidad autónoma gracias al sistema de receta electrónica interoperable.

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