La Consejería de Sanidad ha informado de que, tras modificar los criterios de definición, el número de casos confirmados de listeriosis por el brote relacionado con el consumo de carne mechada «La Mechá» asciende a dos en Extremadura -uno confirmado microbiológicamente y otro por agrupación-, ambos de pronóstico leve, y además hay 15 casos probables y 11 en estudio.

Vergeles ha facilitado estos datos en rueda de prensa al ser preguntado por los acuerdos adoptados en la reunión de coordinación entre el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas, que ha calificado de «tremendamente importante» en una crisis sanitaria de estas dimensiones.

Ha precisado que al modificar las definiciones de caso confirmado, caso probable y caso sospechoso asociados al brote, el número de confirmados ha aumentado a dos en la región, ninguno de los cuales permanece ingresado.

Esto es debido al hecho de que a los pacientes con confirmación por estudio microbiológico que guardan relación epidemiológica con el brote (que había uno), se suman ahora los que sin necesidad de comprobación microbiológica, tienen síntomas compatibles con listeriosis y están relacionados epidemiológicamente con uno de los casos anteriores.

Es decir, familiares u otras personas que hayan comido la misma carne que un caso confirmado microbiológicamente, ha precisado el titular de Sanidad.

Además, hay 15 casos probables, que son aquellos en los que ya se tiene constancia de que, presentando síntomas, tienen el antecedente epidemiológico de haber comido carne mechada en Andalucía.

Y en cuanto a los casos en investigación, de pacientes con síntomas compatibles con una listeriosis que han comido carne mechada pero no conocen la marca o la han ingerido de otra marca, ascienden a once.

Entre los casos registrados en Extremadura «no hay mayores de 65 años ni mujeres embarazadas», ha precisado Vergeles.

Igualmente, ha incidido en el hecho de que, a pesar de la comercialización y retirada de unos 10 kilos de carne de esta marca en un supermercado de Badajoz, «no hay ningún caso de ingestión del alimento contaminado en Extremadura, todos los casos son de ingestión en Andalucía».

El consejero ha manifestado además que, al margen del tratamiento a los pacientes y la detección precoz de los casos, serán «muy insistentes» en la investigación porque es «una bacteria que tiene mucho período de incubación» y «hay que poner mucho trabajo en la seguridad alimentaria».

Sobre la gestión del brote, considera que la contaminación cruzada es algo que se ha tenido en cuenta «más tarde» de lo que se debería, ya que «el día 16 se produce la alerta» sobre la carne mechada «La Mechá» y no es hasta «el día 21 cuando se toma la decisión de inmovilizar el resto de productos cárnicos de la misma empresa».

En cualquier caso, ha defendido que el país tiene «un buen sistema de seguridad alimentaria» y las empresas «serias y responsables», un programa donde se determinan los «puntos críticos» que se pueden contaminar por bacterias y en los que se extreman las precauciones con medidas como la limpieza exhaustiva de superficies y cuchillos.

En Extremadura, ha añadido, se han realizado «miles de inspecciones» a lo largo del último año en establecimientos que venden productos cárnicos y de otras características como leche cruda.

Asimismo, el consejero ha agradecido a los veterinarios y farmacéuticos que hayan sido «tan eficientes y estén permitiendo tener un SES que hoy goza de unas garantías aceptables en relación con la seguridad alimentaria, incluido el establecimiento donde llegó ese lote», del que se ha tenido «la colaboración en todo momento desde el primer minuto»