 Alrededor de 125 menores se han acompañado durante el 2023 a través de los proyectos de infancia en las Cáritas parroquiales Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz.

Un año más, en el marco del Día Mundial de la Infancia, reafirmamos nuestra defensa por la protección de los derechos de los niños y niñas, recordando a la sociedad que son el colectivo más vulnerable y desprotegido.

Por ello, desde Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz, a través de sus Cáritas parroquiales, desarrollan 6 proyectos de infancia, donde, durante 2023, se han acompañado alrededor de 125 menores, con edades comprendidas entre 3 y 16 años.

Estos proyectos tienen como objetivo la mejora de calidad de vida de los menores de la diócesis de Mérida-Badajoz, la promoción de su salud y educación y la protección de sus derechos a través de diferentes actividades y talleres en los que también participan sus familias.

Gracias al trabajo incansable del voluntariado, los proyectos se desarrollan tanto zonas rurales como urbanas, buscando impulsar el desarrollo educativo y sociosanitario.

“Ser voluntaria en el proyecto de infancia, -explica Yolanda Santaeulalia, voluntaria del proyecto de infancia de la Cáritas parroquial de Fuente del Maestre- , es todo un orgullo y satisfacción.

Cada niño y cada niña tiene un potencial ilimitado y trabajamos para ofrecerles un entorno donde
florezca la confianza y la esperanza.”

En estos proyectos, además se realizan actividades y talleres que refuercen sus niveles educativos, proporcionando un acompañamiento integral a los menores y sus familias para la prevención de procesos de deterioro personal, familiar y social.

Por otra parte, a raíz de la aprobación de la Ley Integral de Protección a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia (LOVIPI), se están introduciendo en los proyectos y acciones aspectos recogidos en dicha ley, la cual ha introducido numerosos cambios que conllevan un avance en favor de la protección de los menores frente a la violencia.

Además, supone un gran cambio de paradigma al pasar a un abordaje integral que actúa ante todo tipo
de violencia en todas las fases, con un claro enfoque preventivo y pedagógico.