Según confirman fuentes judiciales, el hombre está siendo investigado por un presunto delito de lesiones dentro del ámbito de violencia de género y la mujer está investigada por un presunto delito de lesiones agravadas.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Cáceres ha decretado dos órdenes de alejamiento recíprocas para los dos miembros de una pareja detenida el pasado lunes en la barriada de San Blas, en la capital cacereña, tras una agresión mutua que requirió la intervención de agentes de la Policía Nacional.
La medida judicial, adoptada tras la puesta a disposición judicial de ambos implicados, busca garantizar la protección de las dos personas y evitar nuevos episodios de violencia, en el marco de una investigación que continúa abierta y en la que se analizan las circunstancias exactas de lo ocurrido.
Antecedentes de los hechos
Según informaron fuentes de la investigación, los hechos se produjeron en la tarde del lunes, cuando varios vecinos alertaron a los servicios de emergencia por una fuerte discusión en el interior de una vivienda ubicada en la citada barriada de San Blas.
A la llegada de los agentes, ambos miembros de la pareja presentaban lesiones visibles, por lo que fueron trasladados a un centro sanitario para recibir atención médica. Posteriormente, y una vez recabada la información preliminar, los dos fueron detenidos y puestos a disposición judicial.
El varón presentaba una herida incisa compatible con el uso de un arma blanca, mientras que la mujer mostraba signos de agresión física.
Calificación provisional de los hechos
En un primer momento, el hombre fue detenido como presunto autor de un delito de violencia de género, al haberse producido los hechos en el marco de una relación de pareja. Por su parte, la mujer fue arrestada por un presunto delito de tentativa de homicidio, ante la existencia de una lesión por arma blanca.
No obstante, tras el análisis de las primeras diligencias y la toma de declaración a las partes implicadas, la calificación jurídica provisional de los hechos ha sido modificada.
De acuerdo con las fuentes judiciales, actualmente:
El hombre está siendo investigado por un presunto delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género, tipificado en el artículo 153 del Código Penal.
La mujer está siendo investigada por un presunto delito de lesiones agravadas, en virtud de lo dispuesto en el artículo 148 del Código Penal, debido al uso de un arma blanca y a la entidad de las lesiones ocasionadas.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas diligencias para esclarecer completamente lo sucedido.
Medidas judiciales adoptadas
Tras la celebración de la comparecencia judicial en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Cáceres, la magistrada instructora ha acordado la imposición de dos órdenes de protección de carácter recíproco, consistentes en sendas órdenes de alejamiento y prohibición de comunicación entre ambas personas.
Estas medidas implican que ni el hombre ni la mujer podrán acercarse el uno al otro, ni comunicarse por ningún medio directo o indirecto (teléfono, redes sociales o intermediarios), durante el tiempo que determine la autoridad judicial.
El objetivo de esta decisión es preservar la integridad física y psicológica de ambos investigados, impedir el contacto y minimizar cualquier riesgo de reiteración de comportamientos violentos, en consonancia con los principios de protección integral y proporcionalidad que rigen este tipo de causas.
Asimismo, la jueza ha recordado que estas medidas tienen un carácter preventivo y temporal, y que podrán ser modificadas o ampliadas en función de la evolución del procedimiento y de los informes periciales que se practiquen.
Actuación de los cuerpos policiales y del juzgado
La intervención policial permitió evitar la escalada de la agresión y asegurar la integridad de ambas personas implicadas. Los agentes actuantes remitieron el atestado al juzgado competente, que asumió la causa por tratarse de un caso en el ámbito de la violencia de género.
Una vez recibidas las diligencias, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Cáceres ordenó la toma de declaración de los investigados y de los testigos, así como la práctica de informes médicos y periciales destinados a determinar la entidad de las lesiones, la dinámica de los hechos y el nivel de riesgo existente.
Contexto y alcance judicial
Las fuentes consultadas subrayan que este tipo de actuaciones judiciales se enmarcan dentro del protocolo de actuación en casos de violencia en el ámbito de la pareja o expareja, el cual contempla la posibilidad de adoptar medidas de protección mutuas cuando las circunstancias del caso lo aconsejan.
La jueza ha resaltado la importancia de preservar la neutralidad procesal mientras se recaban las pruebas y se esclarecen los hechos, reiterando que la calificación de los delitos es provisional y no implica pronunciamiento de culpabilidad en esta fase del procedimiento.
El juzgado mantiene el procedimiento bajo secreto parcial de actuaciones, a fin de proteger la intimidad de las personas implicadas y garantizar el correcto desarrollo de la instrucción.
Estado actual de la causa
La causa continúa en fase de instrucción, y la autoridad judicial ha solicitado informes complementarios tanto de los servicios sanitarios como de las unidades especializadas en violencia de género. En las próximas semanas se prevé la práctica de nuevas diligencias y la incorporación de los resultados periciales a la investigación.
Hasta la conclusión de la instrucción y la posible apertura de juicio oral, las medidas de alejamiento permanecerán vigentes.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Cáceres reafirma con esta decisión su compromiso con la protección integral de las víctimas de violencia de género y doméstica, actuando con rigor y equilibrio ante los casos de agresión mutua en el ámbito de la pareja.
La adopción de una doble orden de alejamiento responde a la necesidad de garantizar la seguridad personal y la paz social, en un contexto de investigación judicial que aún no ha concluido.



