Durante la campaña de caza mayor se celebrarán una media de 75 monterías cada fin de semana en la región.
La temporada de monterías, batidas y ganchos arranca oficialmente este sábado en Extremadura, dando inicio a uno de los periodos más importantes del calendario cinegético regional.
Hasta el 15 de febrero de 2026, los cazadores podrán practicar estas modalidades incluidas en la caza mayor, que permiten la captura de jabalíes, ciervos, gamos, muflones y arruís, según el calendario autorizado por la Dirección General de Gestión Forestal, Caza y Pesca.
Aunque la temporada general de caza 2025-2026 comenzó el pasado 1 de abril, este fin de semana supone el inicio efectivo de las modalidades más emblemáticas del campo extremeño, que atraen a miles de cazadores y visitantes cada año.
Una actividad que llena los pueblos y genera riqueza en el medio rural
Durante la campaña de caza mayor, Extremadura celebra una media de 75 monterías cada fin de semana, lo que representa unas 1.500 monterías al año. En torno a ellas se genera un movimiento económico estimado en más de 200 millones de euros, que impulsa sectores como la hostelería, el turismo rural, el transporte, la restauración y los servicios auxiliares de las fincas.
El consejero de Gestión Forestal, Caza y Pesca, Francisco Ramírez, ha subrayado el impacto positivo que tiene esta actividad sobre la economía y la vida social en las zonas rurales:
“La caza en general, y las monterías en particular, llenan muchos pueblos los fines de semana en Extremadura”, ha señalado el consejero, recordando además que tanto la montería como la rehala están declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) por su valor etnográfico y tradicional.
Ramírez ha avanzado que la Consejería de Gestión Forestal trabaja, junto con la Fundación Artemisán, en un nuevo estudio de impacto económico, cuyos resultados preliminares apuntan a que la cifra global de beneficios será incluso superior a la estimación actual.
Extremadura, referente nacional e internacional del turismo cinegético
La Junta de Extremadura ha recordado que las monterías han convertido a la región en un referente del turismo cinegético a nivel nacional e internacional.
El prestigio de sus fincas, la calidad de sus trofeos y la riqueza natural de su paisaje han hecho que la comunidad se consolide como destino de referencia para cazadores españoles y extranjeros, especialmente procedentes de otros países europeos y del continente americano.
De cara a la nueva temporada, el consejero ha manifestado unas expectativas muy positivas, gracias a las condiciones ambientales de este año:
“La primavera lluviosa que hemos tenido ayudará a mejorar la calidad de los pastos y, en consecuencia, aumentará la calidad de los trofeos de cérvidos”, ha explicado Ramírez
Arranca también la temporada de caza menor
Junto con la caza mayor, este fin de semana se abre también el periodo hábil para la caza menor.
Desde el domingo 12 de octubre, se podrán cazar especies como perdices, conejos, becadas, ánades reales, patos, cucharas, cercetas comunes, fochas, agachadizas comunes y zorros, además de liebres, estorninos pintos, grajillas y urracas, especies que ya contaron con media veda entre el 15 de agosto y el 8 de septiembre.
El calendario de caza menor establece días hábiles diferenciados según la especie, el coto y la modalidad, y finaliza entre diciembre de 2025 y febrero de 2026, dependiendo del caso.
Novedades: licencia telemática gratuita y nuevos cazadores
Entre las principales novedades de la temporada 2025-2026 destaca la implantación de la licencia de caza telemática gratuita, en vigor desde el pasado mes de agosto.
En apenas dos meses, 2.300 cazadores extremeños ya han tramitado su licencia por esta vía.
Además, el último curso organizado por la Federación Extremeña de Caza ha permitido incorporar más de un millar de nuevos cazadores a la práctica legal y reglada de la actividad, lo que demuestra el creciente interés por la caza sostenible en la región.
Una caza sostenible y responsable
La Junta de Extremadura reafirma su compromiso con una caza responsable, equilibrada y sostenible, que contribuya a la conservación del medio natural y a la gestión adecuada de las poblaciones silvestres.
“La temporada comienza con un enfoque renovado hacia la sostenibilidad y la gestión responsable, buscando un equilibrio que garantice la práctica cinegética sin comprometer el estado de conservación de las especies ni la salud de nuestros ecosistemas”, ha destacado el consejero Ramírez.
En este sentido, la región se consolida como un modelo nacional de seguimiento de especies cinegéticas.
Durante el último año se han llevado a cabo 273 censos en 16 cuadrículas UTM de 10×10 kilómetros, lo que permite mantener un control exhaustivo de las poblaciones y asegurar una caza equilibrada.
📍 Una tradición que une, conserva y dinamiza
La caza en Extremadura, además de su impacto económico, tiene una profunda raíz cultural y social. La montería y las batidas forman parte del patrimonio inmaterial de la región y contribuyen a mantener el equilibrio ecológico, controlar poblaciones y prevenir daños en cultivos y ecosistemas.
La Junta de Extremadura anima a todos los cazadores a disfrutar de la temporada con responsabilidad, respetando las normas de seguridad, los cupos y las especies, y contribuyendo así a la preservación del entorno natural que hace de la región un referente cinegético a nivel nacional.



