• La patronal considera que la última parada es “una excepción” y alerta de que la industrialización de Extremadura elevará la demanda de energía

 

  • Recuerdan que Europa se ha posicionado a favor de extender la vida útil de las centrales como “una de las formas más económicas de asegurar energía limpia a gran escala”

La Confederación Independiente de Empresarios de la provincia de Badajoz (CIEM) pide trabajar con rigor por el futuro de la Central Nuclear de Almaraz, “como recurso esencial para Extremadura desde el punto de vista social, económico y también medioambiental”.

Los empresarios apelan a no hacer cábalas con su futuro mientras no exista “una alternativa que garantice el suministro energético” que aporta ahora al mix actual de forma permanente; “así como al empleo”, tanto de forma directa en municipios de la zona, como también en otros puntos de la comunidad autónoma a través de las empresas auxiliares que le prestan servicio.

Los empresarios advierten además que la industrialización que se proyecta en Extremadura supondrá un incremento de la demanda de energía sobre la que hay que aportar a los inversores certezas. “Hablar de cierre sin verdaderas garantías de suministro aún es añadir incertidumbre a las inversiones”, apunta Iniesta.

El presidente de CIEM, José Luis Iniesta, considera que la parada que se ha llevado a cabo en uno de sus reactores en las últimas semanas por el exceso de producción en renovables es “algo excepcional, que no se habían producido nunca”. Por eso “no se puede tener en cuenta para avalar un cierre amparado en una transición ecológica que se vería afectada de forma negativa con esta clausura”.

La patronal hace valer que la energía nuclear está considerada como verde en la Unión Europea y por tanto libre de emisiones de CO2. De hecho, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, ha abogado este jueves por extender la vida útil de las centrales como “una de las formas más económicas de asegurar energía limpia a gran escala”.

Los empresarios apuntan que Almaraz aportó en 2023 al mix el 7% de la demanda eléctrica en España, que se debería asumir tras un cierre con medios que elevarían las emisiones de CO2. Temen, además, el impacto que eso tendría en cuanto al encarecimiento en la factura energética.

CIEM señala también “la capacidad acreditada de la central para generar empleo de calidad, fijar población y propulsar el crecimiento económico del tejido empresarial de la zona y de Extremadura” a través de contratos con empresas auxiliares que prestan servicios a la central. En Extremadura, el impacto estimado sobre el PIB es de 115 millones.