El Instituto Nacional de Toxicología advierte de un aumento de las intoxicaciones relacionadas con la mezcla de productos de limpieza durante el confinamiento. La obsesión por eliminar el coronavirus de los hogares están provocando conductas imprudentes que pueden tener serias consecuencias.

Irritación faríngea y picor de la piel. Aumentan las intoxicaciones por la mezcla de lejía y otros desinfectantes en el afán por eliminar el coronavirus en el ámbito doméstico.

El Instituto Nacional de Toxicología ha registrado un aumento de 1.600 consultas telefónicas a raíz de intoxicaciones gestionadas por sus médicos y provocadas por la mezcla de lejía y otros desinfectantes de superficies.

Más de la mitad de las consultas son por la mezcla con amoniaco, el más habitual y que produce una reacción química que genera un gas cloramina altamente tóxico, produce ácido clorhídrico en contacto con las mucosas.

Otras mezclas que han resultado peligrosas son la lejía con el vinagre, alcohol, anticalcáreos, limpiahogares o lavavajillas.

La recomendación es no mezclar productos de limpieza porque puede provocar intoxicaciones respiratorias y dermatológicas.