APAG Extremadura Asaja ha calificado de “expolio” la orden de coeficientes de módulos aplicable al IRPF del sector agrario, publicada en el día de hoy, puesto que según su redacción “perjudica claramente a Extremadura”.

Entre los puntos perjudiciales, nuestra región tendrá coeficientes de cotización más elevados que otras comunidades autónomas, como por ejemplo en el olivo, con un índice de un 0,13 frente a diversos municipios del resto del país, que es a 0,09. Con la uva para vino con DOP y sin DOP para exactamente igual, puesto que frente a los 0,26 y 0,32 respectivamente que abonará un productor extremeño, el de otros puntos pagará el 0,05 al 0,22.

Con los cereales Extremadura tributará el 0,18, mientras que otros pagarán de 0,09 a 0,13. En otro de los cultivos estrella para la región, como es el del tomate, aquí se cotizará a 0,26%, frente al 0,18% que pagarán en municipios de Andalucía y Castilla La Mancha. En la apicultura, el bovino de carne, entre otros, se recogen reducciones prácticamente insignificantes, como en los frutales.

La publicación de este decreto, en Jueves Santo, con nocturnidad y alevosía, es un atentado contra los agricultores y ganaderos extremeños por los coeficientes de módulos que aplica a los productores extremeños sobre el IRPF, demostrando que para el gobierno de Pedro Sánchez Extremadura y su sector primario “no le importan nada”.

Después de un 2019 para olvidar, con una sequía muy importante afectando a todas y cada una de las producciones agroganaderas, con una crisis de precios en la mayoría de las producciones agrarias, con todos los factores negativos y pérdidas en la cuenta de resultados, el gobierno publica hoy el coeficiente de módulos donde perjudica claramente a Extremadura y dejándola fuera de todo tipo de ventajas fiscales por la sequía del año 2019 o por la DANA, que sí se recoge para otras CCAA.

Con la publicación de la Orden de hoy, del Real Decreto de esta semana para, supuestamente, favorecer la mano de obra en la recogida de cosechas o con el borrador de ayudas al sector ovino y caprino, que ha caído en picado sus ventas, se está legislando sin tener en cuenta a los profesionales y maltratando a nuestra región. No puede ser que no escuche a regiones en las que tiene tanto peso el sector agroganadero o que se obvien las alegaciones presentadas por Asaja para mitigar esta problemática, ya sea en el ovino y caprino, pero también en el porcino ibérico o en el vacuno.

Estamos ante un ejecutivo que se dedica a vender humo sin favorecer para nada al sector primario, poniendo la agricultura como una de sus últimas prioridades, saqueando a agricultores, ganaderos y apicultores, a pesar de que somos la base de las zonas rurales y, como se ha demostrado en estos momentos delicados, un pilar básico para el sostenimiento del estado se ha concluido.