AMUS y la Junta de Extremadura han contribuido de manera decisiva a la creación de nuevas colonias de Buitres negros y leonados en diferentes áreas geográficas europeas. Muchos años generando sinergias, exportando biodiversidad.

Extremadura se ha posicionado en el epicentro del mapa en cuanto a acciones de conservación internacional. La comunidad de contrastes paisajísticos en donde el sistema adehesado y las sierras jalonadas de exuberante vegetación mediterránea han propiciado un territorio en donde medran especies de alto estatus, amenazadas o extinguidas en muchos rincones del continente.

El excelente nivel de conservación de Extremadura por ejemplo en el que se encuentran algunas necrófagas como el buitre leonado y el negro (este último con unas 900 parejas, suponiendo el 50% de la población total del país y con un 40% del total de la población europea) atestiguan del óptimo grado de preservación de sus ecosistemas y del mantenimiento de sus aprovechamientos ancestrales en este caso del ganado en extensivo (ovejas, cabras, vacas, cerdos…)

Las florecientes poblaciones de buitres son el resultado precisamente de esta gran biomasa que generan las dehesas, además de los grandes herbívoros salvajes, como son ciervos y jabalíes, y por supuesto de siglos de evolución con apenas grandes perturbaciones o modificaciones sobre el paisaje además de una reducción de las problemáticas clásicas como son el uso de veneno o las molestias en zonas de reproducción.

En este contexto de liderazgo en buitres, surgen proyectos de cooperación en el que la solidaridad y la visión global y de interconexión impera. Los Buitres se desplazan de unos lugares a otros a través de puentes de conexión; fortalecer estos lazos creando nuevas colonias o fortaleciéndolas en las áreas históricas de distribución de estas especies en Europa, es el principal objetivo de estos proyectos.

AMUS y el Centro de recuperación de los Hornos de la DGS de la Junta de Extremadura llevan ya años, cooperando con la Fundación VCF, cumpliendo esta misión tan decisiva e importante en términos de recuperación de especies no solo con el reforzamiento en áreas tan alejadas como puede ser Bulgaria, Cerdeña o Chipre sino demostrando al mismo tiempo su capacitación en las acciones y relaciones interinstitucionales.

Los nueve ejemplares de Buitre negro que viajan proceden de Extremadura y Andalucía habiéndose recuperados en diferentes centros de ambas comunidades, recorrerán más de 5000 kilómetros y formarán parte de las colonias ya incipientes y que ya se reproducen de este país de la Unión Europea.