La Junta de Extremadura celebra que el lince ibérico ya no esté considerado como una especie en peligro de extinción y pase a la categoría de vulnerable, lo que supone un éxito del programa de reintroducción que se ha llevado a cabo durante años para proteger esta especie.
En este 2024 se cumplen 10 años del Programa de Reintroducción del Lince Ibérico en la península, un programa en el que colaboran varias comunidades autónomas, el Gobierno central, Portugal, la Unión Europea y otros organismos, y esta noticia da muestras del trabajo bien hecho en este programa.
El hecho de que el lince ibérico pase a la categoría de vulnerable es una gran noticia y un caso de éxito mundial que la Junta acoge con enorme satisfacción porque supone que todas las acciones que se han llevado a cabo para protegerlo están dando sus frutos.
Este cambio de categoría supone un hito en la historia de la conservación puesto que se ha conseguido que un felino pase a esta nueva situación y, por ello, se buscará que el lince pueda comenzar a valerse por sí mismo y sea más libre como cualquier especie silvestre.
Cabe destacar que esto no supone que la Junta no siga trabajando en la conservación de esta especie, a la que se seguirá muy de cerca y se continuará participando en los programas LIFE. El reto es crear una población consolidada y viable de esta especie en la península en el que Extremadura va a participar activamente en conseguirlo.
En la actualidad, la región cuenta con más de 250 individuos y en la Península Ibérica hay 14 núcleos poblacionales de presencia estable y reproducción constatada de lince ibérico, de los que 13 están en España y uno en Portugal. En total, hay contabilizados más de 2.000 linces ibéricos en la península.