Ángel Pacheco afrontará su tercer mandato en Cooperativas Agro-Alimentarias Extremadura tras ser reelegido como presidente de dicha organización para los próximos cuatro años en la Asamblea Generalcelebrada este miércoles en Mérida.

Tras encabezar la única candidatura a la Presidencia, en declaraciones a los medios tras su reelección, Pacheco ha agradecido la confianza depositada en su equipo y él mismo por las cooperativas agroalimentarias extremeñas, y ha subrayado que seguirán trabajando en la misma línea que hasta ahora.

En concreto, ha señalado que continuará trabajando en favor de la integración cooperativa para «intentar tener una dimensión apropiada y seguir siendo competitivos en el mercado»; así como para incidir en el incremento progresivo de la presencia de la mujer en los órganos de dirección de las cooperativas; y para favorecer la incorporación de los jóvenes al sector.

«Tenemos la mano siempre abierta para todas las administraciones y con todos los organismos para trabajar conjuntamente con ellos», ha espetado Pacheco, quien ha destacado el trabajo que ha venido realizando Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura a través de la Sectorial de Igualdad, y que ha permitido pasar en cuatro o cinco años de contar con dos mujeres presidentas de cooperativas a 15 en el último año.

Esta labor, además, ha permitido que mientras que en 2018 se registraban una mujer por cada 14 consejeros en cooperativas, ahora la cifra se eleva a una mujer cada cinco consejeros. «Todavía queda mucho por hacer pero estamos en la buena línea», ha sentenciado a los medios en un receso de la Asamblea General del organismo, celebrada este miércoles en la Cámara legislativa extremeña, en Mérida.

De igual modo, sobre la incorporación de jóvenes agricultores al sector, ha reconocido que están «muy preocupados», y ha considerado que hay que trabajar con todas las administraciones y con toda la sociedad en general para «valorizar» el sector primario, que es el «primer sector productivo» en Extremadura y que ofrece una «posibilidad de seguridad y trabajo para los jóvenes en el futuro que hay que aprovechar». «Y por eso tenemos que hacerlo atractivo para que se incorporen al sector agrario», ha espetado.

Según ha dicho, sí que hay «interés» de los jóvenes por incorporarse al sector agrario, pero «las jubilaciones y el envejecimiento van mucho más rápido que la incorporación de los jóvenes», y por eso ha abogado por la dotación de «más políticas activas para el incremento de la incorporación de jóvenes».

Las herramientas que estamos utilizando van en el buen camino pero también se han demostrado que no solamente económicamente son suficientes. Ayudas a la incorporación son importantes pero yo creo que además tenemos que intentar utilizar sobre todo las Nuevas Tecnologías, adaptarlas a las nuevas explotaciones y fundamentalmente hacerles unas explotaciones atractivas que les interesen y que sean compatibles con su forma de pensar», ha espetado.

MENOS BUROCRACIA

Asimismo, preguntado sobre las protestas de los agricultores del pasado invierno, ha reconocido que los problemas en todos los sectores están «siempre ahí», y ha apuntado que les preocupa «muchísimo» la burocracia relacionada con la PAC y con los permisos y autorizaciones para inversiones. «No podemos estar tramitando nuevos proyectos agroindustriales y tener un periodo de tiempo larguísimo en la tramitación», ha espetado.

También ha defendido que la flexibilización de la PAC «siempre va a venir bien en buen sentido»; así como que hay que «ser coherentes» en materia de sostenibilidad en el campo, porque «no hay nadie más sostenible que el sector primario».

De igual modo, ha señalado la necesidad de que en la Ley de la Cadena desde el punto de vista legal la posición de las cooperativas cuente con el «tratamiento que corresponde» adaptándose a sus necesidades. «No somos unas empresas, sociedades anónimas, sociedades limitadas cuyo único objetivo es el beneficio, sino que somos empresas de economía social, gran parte de nuestros beneficios lo trasladamos a nuestro territorio en todas las zonas donde estamos ubicados luchando contra el despoblamiento», ha espetado.

MODELO DE GARANTÍA

A su vez, el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias España, Ángel Villafranca,ha destacado que más de 31.000 familias viven de su actividad en las cooperativas agroalimentarias extremeñas, que facturan más de 1.600 millones de euros.

También ha defendido el modelo cooperativo como «modelo de garantía para poder atender la rentabilidad de los agricultores».

Sobre la actividad del sector, ha dicho que «afortunadamente» este año va a «acompañar la climatología», pese a lo cual ha entendido que hay que seguir demandando «infraestructuras de agua para poder estabilizar las producciones, para que las cooperativas, su comercialización pueda ser regular y al mismo tiempo pueda trasladar su rentabilidad a los socios» y, de ese modo, poder aplicar un relevo generacional «mucho más atractivo».

«Si no hay rentabilidad, si no tenemos producción, difícilmente nuestros jóvenes se van a quedar, difícilmente podemos sacar adelante nuestras familias», ha espetado Ángel Villafranca, quien ha defendido que el sector «necesita agua, tener regularidad de salida del producto».

APOYO DEL GOBIERNO

De su lado, el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, ha trasmitido la importancia del sector cooperativo, que «es capaz de llevar a cabo proyectos conjuntos de los propios agricultores, que está implantado en el medio rural, que es capaz de fijar población, y que tiene un retorno de los propios beneficios».

Así, ha incidido en el «apoyo» del Gobierno central al sector cooperativo «con la intención de desarrollar las cooperativas y todo el mundo cooperativo que tanta falta hace en los pueblos de Extremadura».

Interpelado sobre el relevo generacional en el campo, Quintana ha reconocido que se trata de un «problema» del sector agrario y que «hay que ir abordando». «Pero las cooperativas ya en su desarrollo económico están de alguna forma luchando para mejorar la vuelta de los jóvenes al campo», ha destacado.

«Hoy el trabajador del campo no es el que había, las labores en el campo no son las que había, y a lo mejor hace falta una labor pedagógica de la dignidad que significa el trabajo en la agricultura y el posterior desarrollo agroalimentario en las múltiples industrias que tiene la región», ha añadido.

En todo caso, ha reconocido que «es verdad» que hay un «problema de relevo generacional» donde «muchos jóvenes no ven el atractivo suficiente para acudir al campo». «Tendremos que luchar entre todos y creo que las cooperativas tienen aquí un papel importante y por supuesto todas las administraciones también», ha concluido.

LEGISLACIÓN DESDE LA ASAMBLEA

Por su parte, en la clausura de la Asamblea de Cooperativas Agro-Alimentarias Extremadura, la presidenta del Legislativo extremeño, Blanca Martín, ha destacado la labor que realiza el sector primario, y ha defendido la necesidad de «seguir avanzando» en el reconocimiento de sus demandas a través de un «apoyo institucional en todos los niveles».

En este sentido, tras resaltar que las cooperativas están configuradas «de abajo, del cooperativista pequeñito, que son los que hacen la pequeña o la gran cooperativa o la asociación para trabajar en el mismo sentido», ha recordado la importancia de las mismas para contribuir al reto demográfico.

Blanca Martín también ha recordado que desde la Asamblea de Extremadura se han aprobado «muchas leyes» que tienen que ver «mucho» que ver con el campo y, entre ellas, la Ley de Sociedades Cooperativas que, considera, «para algo ha servido».

En este marco, ha resaltado como un dato «importantísimo» el hecho de que haya 15 mujeres que ocupan presidencia de cooperativas agroalimentarias en la comunidad.

EP