Según el XIII Informe ‘El Estado de la Pobreza en España’ 4,2 millones de personas sobreviven con ingresos inferiores a 560 euros al mes por unidad de consumo.

Una de cada cuatro personas están en riesgo de pobreza y exclusión en España, es el 26% de la población, 12 millones de ciudadanos. Así lo recoge el XIII Informe ‘El Estado de la Pobreza en España. Seguimiento de los indicadores de la Agenda UE 2030. 2015-2022’ elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES).

1,4 millones de personas con educación superior en España están en riesgo de pobreza o exclusión social, es el doble que en 2008 (674.000) y la cifra más alta de todo el periodo analizado. Los autores confirman una «tendencia» detectada en los últimos años «que el empleo sin condiciones adecuadas no garantiza ingresos suficientes para salir de la pobreza». Una de cada tres personas en situación de pobreza (32,9%) tiene un trabajo remunerado y lo atribuyen a los bajos salarios y la precarización del mercado laboral desde 2008.

Los datos aclaran que el coste de la vivienda, la brecha de género y los apoyos insuficientes a las familias con menores son «factores clave» para la generalización de la pobreza en España. Juan Carlos Llano, uno de los autores de este informe, matiza además que «la mayoría de la pobreza está en las zonas urbanas, sólo el 15% de la población pobre está en el ámbito rural».

Gasto elevado en la vivienda

El 39,1% de los ingresos de un hogar pobre se va en el alquiler y la educación y el trabajo ya no protegen contra la pobreza y la exclusión. El estudio muestra que en 2022 una de cada cuatro personas en España con un gasto elevado en vivienda estaba en situación de pobreza.

Desigualdad de género: factor clave

El informe identifica que la desigualdad de género de nuevo es un punto clave para la pobreza. El 27,2% de las mujeres están en riesgo de pobreza frente al 24,8% de los hombres. Asimismo, las políticas para que consigan salir de ellas no llegan de manera igualitaria a ambos géneros. Desde 2015 dichas políticas sociales han conseguido sacar de la pobreza a 61.000 mujeres, mientras que en el caso de los hombres la cifra alcanza el medio millón.

Otras de las conclusiones que los autores califican como «más preocupantes» es la relativa a las familias que tienen menores a su cargo, ya que son las que tienen las cifras más altas en los indicadores de pobreza y exclusión. En España casi 2,6 millones de niños, niñas y adolescentes se encuentran en esta situación de riesgo.

Aunque, no todo son malas cifras, ya que el estudio también destaca que los indicadores de pobreza y exclusión social han tenido una mejoría respecto a 2021. En 2022 en España había 12,3 millones de personas en riesgo de pobreza y exclusión social, 800.000 menos que el año anterior.

Aún así los autores advierten de que estas cifras son «todavía extraordinariamente elevadas» debido a que 4,2 millones de personas sobreviven con ingresos inferiores a 560 euros al mes por unidad de consumo.

La mitad de la población no llega a fin de mes

En 2022 casi la mitad de la ciudadanía española tuvo dificultades para llegar a fin de mes (47,8%), un tercio no pudo permitirse al menos una semana de descanso vacacional al año (33,5%) y el 17,1% no consiguió mantener su hogar a una temperatura adecuada.

Se destaca en el informe el «papel protector del Estado» y avisan de que «sin políticas de protección social ni pensiones públicas, el número en situación de pobreza se duplicaría, llegando a afectar casi a la mitad de la población».

La situación de pobreza es desigual en el Estado, los autores constatan un año más «una división de España en dos mitades«: las comunidades que se encuentran desde Madrid hacia el norte conservan, por lo general, tasas más bajas de pobreza y exclusión social. Por el contrario, las situadas al sur, registran cifras «extraordinariamente elevadas y por encima de la media nacional».

Desde la Red Europea de Lucha contra la Pobreza piden un Pacto Estatal de Prevención y Lucha contra la Pobreza y la Exclusión para abordar «con una marcada perspectiva de género» ámbitos como la calidad del mercado laboral, la garantía de ingresos o el derecho de acceso y mantenimiento a una vivienda.

ondacero.es