Critica que en época de restricciones Europa, en agricultura y ganadería se puede permitir que entren productos extracomunitarios «en cualquier condición».

El presidente de la organización agraria APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri, ha expresado su «malestar» por el hecho de que países no productores de arroz «impongan» criterios a los que sí lo son.

Metidieri se ha referido a la última aprobación realizada por el Grupo de Trabajo de Medio Ambiente del Consejo de Europa que ha decidido validar una propuesta para aumentar en los arroces importados el nivel máximo de residuos, entre los que se encuentra el Triciclazol, cuyo uso está prohibido para los arroceros europeos.

Según la organización agraria, votaron los 17 Estados Miembros de este grupo de trabajo en la Unión Europea y sólo seis países, entre ellos, España, se opusieron a la propuesta.

«Pero ganó la otra parte, compuesta por países del centro y norte europeo, en su mayoría países que no producen arroz, pero que sí van a decidir sobre aquellos para los que esta producción sí es fundamental», critica.

De este modo, APAG Extremadura Asaja no entiende cómo en plena época de restricciones en Europa, en agricultura y ganadería se puede permitir que entren productos extracomunitarios «en cualquier condición».

Además, señala que «no sólo se financian plantaciones o regadíos en otros países no comunitarios que lo que hacen es ofrecer una situación de competencia desleal, como es el caso de Marruecos, sino que, a su vez, aquellos productos que recibimos para Europa, lo que a nosotros se nos prohíbe, a ellos se les permite y autoriza».

Así, afirma que si no rectifica la Comisión Europea esta política «anti-agricultura» que están llevando a cabo, se pone a su juicio «más que en riesgo» la soberanía alimentaria.

«Es Europa la que está favoreciendo con estas medidas que haya más despoblación en zonas rurales, que Europa se esté empobreciendo en muchos pueblos y, en definitiva, crear una sociedad más débil», argumenta Juan Metidieri.

Extremadura Asaja valora el voto en contra de España, pero considera que «no ha sabido gestionar bien esta negociación con miembros aliados», porque «hay países que no producen arroz que van a decidir» sobre el resto.