La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, se ha reunido este jueves con la Asociación de Municipios en Áreas de Centrales Nucleares (AMAC) en Mérida.
Un encuentro en el que ambas partes han defendido la importancia «unir esfuerzos» para tratar de revocar el cierre de la central nuclear de Almaraz y garantizar su funcionamiento.
Junto a la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán, Guardiola ha recordado que solicitó esa revocación durante la reciente reunión mantenida con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tanto de forma verbal como por escrito, a través de un documento formal con 88 medidas encaminadas a mejorar la vida de los extremeños y a garantizar el empleo en nuestra región y, especialmente, en zonas rurales como Campo Arañuelo.
Para Guardiola, el plan de cierre de las nucleares no solo afecta a un pueblo, una comarca, una provincia o una región como la nuestra, sino también a la soberanía energética del país, al desarrollo industrial de Extremadura y de otras regiones.
«No existen razones técnicas ni objetivas para este apagón», ha sostenido para después mostrar su preocupación por las miles de familias que se podrían quedar sin trabajo y pedir unidad de acción a todos los agentes implicados tratar de mantener abiertas las centrales nucleares lo máximo posible.
Por su parte, el presidente de AMAC, Pedro Sánchez Yebra, en representación de los municipios de esta Asociación en la zona de Almaraz, ha trasladado su preocupación por el cierra de la central nuclear de Almaraz y los graves perjuicios que ocasionaría tanto para el desarrollo como para el empleo de esta zona.
Un sentimiento compartido por la presidenta extremeña, a quien Sánchez ha agradecido su ofrecimiento a apoyar cualquier acción para evitar su cierre, uniendo esfuerzos para garantizar el funcionamiento de una instalación vital para el POP territorio.